PDI de Viña creó un formulario para que estafados hicieran su denuncia
Hasta en Isla de Pascua cayó una persona que le creyó todo a AC Inversions.
Durante la jornada de ayer no paraban de llegar personas hasta la PDI de Miraflores en Viña del Mar, que decían haber sido estafadas por AC Inversions, la firma que prometía alta rentabilidad a sus clientes (entre un 2,5% y un 7,5 % mensual), a cambio de entregar el mínimo de $1 millón.
Alrededor de las 18 horas, ya eran más de 40 las que habían llegado para entregar sus testimonio. Como eran tantos los afectados, la policía civil debió crear un formulario tipo, ya que no podían entrevistar a cada uno de los estafados. En el papel debían poner sus datos personales, el dinero invertido y otros detalles de la relación comercial que tuvieron con AC Inversions.
En Viña del Mar la empresa atendía a sus clientes en una oficina ubicada en el edificio Pamplona, de 12 Norte 785, pero bajo el nombre de Inversiones Pérez y Muñoz.
A dicho lugar llegó ayer una importante cantidad de afectados, que habían recibido un correo de Pérez y Muñoz, donde se les explicaba que debían dirigirse hasta la PDI de Miraflores a poner la denuncia. Para ello, en la misma oficina se les estaba entregando un documento que certificaba que efectivamente habían invertido en la cuestionada empresa. Una de las víctimas dijo que la idea era realizar una demanda colectiva después, mientras que una funcionaria explicó que tenía órdenes de entregar toda la documentación a quienes hicieran la solicitud.
Mientras, la Fiscalía Regional recibió la denuncia de una persona de Isla de Pascua, quien también asegura haber caído en la trampa de AC Inversions.
Perdió 25 millones
En el hall de la PDI viñamarina ayer había una señora jubilada que muy nerviosa llenaba el formulario. Al terminar el trámite accedió a conversar con La Estrella, pero no quiso que se revelara su identidad. Este es su relato: "Mi marido trabaja en el Hospital Naval y ahí hay un banco, entonces un día él le hace un comentario a la cajera, le dice 'tan poco que gana uno al ahorrar'. Entonces ella le dice que tiene un dato muy bueno y que lo pondrá en contacto con una persona".
"Yo siempre dudé y por eso discutía con mi marido. A esta niña tienen que haberle pagado o dado un porcentaje por captar gente. ¿Cómo es posible que ella trabajando en un banco enviara a las personas a otro lugar?".
Esto pasó en agosto del 2014. El marido de esta mujer estaba tan convencido del negocio que le dio $5 millones para empezar. Luego ella invirtió otros $20 millones de una casa que vendió. Además él también puso una importante suma -su mujer asegura que es mucho dinero- y le dio otro tanto a cada uno de sus hijos.
"Todos los meses yo recibía 200 mil pesos por los 5 millones de pesos, y por 20 millones, 800 mil pesos. Yo me enteré de esto ayer (el martes) cuando recibí un lindo correo donde me explicaban que no podían pagarme más".
Lo que más le duele a esta viñamarina, es que su esposo hizo todos estos negocios con el fin de jubilarse, pero con esto deberá seguir trabajando, para así recuperar algo del dinero perdido.
Hay que dudar
El ingeniero comercial y auditor, Eduardo Quevedo, profesor de la Universidad de Valparaíso, advirtió que seguramente los ejecutivos de esta empresa deben haberse presentado como expertos del mercado financiero y que podían invertir el dinero de sus clientes consiguiendo una gran rentabilidad.
"Pero son rentabilidades absolutamente absurdas. Cualquier persona que entienda un poquito sabe que en Chile no se pueden alcanzar ese tipo de ganancias. Un depósito a plazo, por ejemplo, está generando un 0,4 por ciento mensual de rentabilidad. Si yo a alguien le ofrezco un 5 ó un 6 por ciento mensual es increíble, pero estos tipos deben haber tenido un alto poder de convencimiento".
Lo que llama la atención a Quevedo es que esta empresa se haya formado tan fácilmente -se informó que su creador, Patricio Javier Santos partió con $3 millones- y no le hayan puestos trabas legales.
Durante la tarde de ayer se informó además que la Superintendencia de Valores y Seguros no tenía atribuciones para fiscalizar a este tipo de empresas, por lo tanto no se puede ver su historial en los registros oficiales.