Existen más de 300 órdenes de demolición sin cumplir en Valparaíso
Municipio porteño prepara licitación pública para demoler propiedades más riesgosas. La responsabilidad principal es de los propietarios.
Una salvada providencial tuvieron ayer Carlos Flores y su pequeño hijo Stevens. Cuando padre e hijo transitaban por la calle Torrealba en el Cerro Mariposa, Carlos observó que una de las murallas de la propiedad signada con el N°10 y abandonada hace ya unos 20 años se desplazó. Tomó a su hijo y atinó a retroceder, justo cuando gran parte de la muralla se desplomaba a sus pies.
Igual de milagroso fue el deslizamiento que se produjo la noche del jueves en el pasaje Coronel Reyna en el Cerro Larraín, donde una propiedad de grandes dimensiones y deshabitada, amenazó a un matrimonio de la tercera edad con morir aplastado.
La más asustada con todo lo vivido fue María Inés Martínez de 81 años quien sintió que un nuevo terremoto azotaba a la ciudad.
"Fue un ruido como de un terremoto. Yo estaba en esa punta y de repente sentí el ruido, salieron los vecinos. Yo estaba sola con mi viejo. Llegó carabineros y no lo encontraron porque él subió y como es sordo no lo encontraban", declaró entre llantos la abuelita que vive con su esposo Marcial Trujillo Traverso de 87 años y quien posee movilidad reducida pues hace un tiempo perdió una de sus piernas.
Demolerán
Lamentablemente los casos antes descritos no son excepcionales en la comuna. De hecho y tal como lo manifestó el jefe de emergencias del municipio, Ricardo Valdés, existen más de 300 órdenes de demolición a las que no se les ha dado cumplimiento.
"Aquí todo lo que ocurren con las viviendas es única y exclusivamente responsabilidad de los propietarios" precisó Valdés.
Excepción
Al tanto de la situación de la pareja de la tercera edad y dadas las dimensiones de la propiedad afectada y el riesgo inminente de derrumbe y sus efectos sobre al menos dos propiedades, el municipio de Valparaíso de manera excepcional, contratará en el caso de Pasaje Coronel Reyna a una empresa para demoler la casa en ruinas.
"De manera excepcional y debido a las dimensiones de la propiedad y a las consecuencias que tendría si se desplomase completamente vamos a contratar directamente a una empresa de demolición de acuerdo a lo que determina la Ley General de Urbanismo y Construcción", precisó Valdés.