Drogaron y robaron a abuelita en pleno centro de Valparaíso
Dos mujeres hurtaron joyas y dinero a mujer de 81 años. La familia dice que le dieron burundanga.
Carolina Pinuer A. - La Estrella de Valparaíso.
Un infierno vivió la señora Audilia Molina de 81 años en pleno centro de Valparaíso. Como cualquier día, el miércoles bajó desde su casa ubicada en la avenida Mercante de Playa Ancha, en dirección al centro de Valparaíso. Mientras caminaba por la calle Bellavista, se le acercó una mujer que aseguraba andar perdida, ahí fue cuando comenzó la pesadilla. Patricia Castro, hija de la abuelita, relata que "la mujer le dijo a mi mamá que andaba buscando una dirección, pero que no sabía leer, y le pidió ayuda para llegar. Supuestamente venía desde Valdivia, se había ganado el loto y quería cobrar muchos millones, le contó un cuento". En este confuso momento llegó otra mujer que se ofreció a entregarle a esta supuesta mujer perdida, pero todo fue un montaje, ambas mujeres sólo querían robarle a la señora Audilia.
LA DROGARON
De un momento a otro la abuelita comenzó a perder el control y seguía todas las indicaciones que le daban estas mujeres. "No sabe cómo, no se explica cómo fue que llegaron hasta la casa de mi mamá. Incluso algunos vecinos la vieron llegar acompañada de estas mujeres, pero decían que ella se veía normal", cuenta Patricia.
Todo tenía una explicación, la familia cuenta que según la posterior evaluación de un médico, a la mujer le habían tirado burundanga, esta famosa droga que hace perder el conocimiento y anula la voluntad.
El robo
Lo que recuerda Audilia es que al llegar a su casa comenzaron a pedirle sus joyas y dinero, por los efectos de la droga ella accedió a entregarles todo lo que tenía. "Les pasó todas sus joyas, incluyendo los anillos de mis tatas, que es lo que más siente, también unos dólares que le había mandado mi hermana que vive en Estados Unidos", cuenta la hija.
Después de eso, le preguntaron si tenía dinero en el banco y la llevaron hasta el Servi Estado ubicado en Errázuriz, donde sacaron la suma de 700 mil pesos desde la cuenta de la anciana. Ahí fue cuando se comenzó a sentir mal, a marearse y transpirar, y se dio cuenta que le habían robado. Las mujeres desaparecieron.
Tiene miedo
Según lo que relata la hija, la señora Audilia dice que las señoras no tenían más de 50 años y ambas tenían un acento distinto, no logra identificar si boliviano o peruano.
Ahora, la abuelita se tuvo que ir a la casa de su hija. "La voy a tener acá toda la semana yo creo porque está muy asustada. Mis hermanos y yo también estamos histéricos, porque mi mamá es una persona súper independiente y de muy buen corazón. Ahora estoy en la búsqueda de una persona que la acompañe porque anda con miedo y todavía no se explica cómo pasó todo esto", relata Patricia.