Nicole Valverde S.
Es un día soleado. Caminamos por el borde costero de una ciudad cualquiera. Que se parece mucho a Valparaíso, pero no lo es. El mar está bravo. Hay marejadas más que "anormales", como las describe la Armada. Enormes olas de un azul profundo rompen sobre la arena, los muros, las veredas y las calles.
Observamos de lejos. Intimida. Pero la fuerza del mar nos atrae como un imán. Nos acercamos desafiando el miedo. Sabemos que las olas nos alcanzarán. Viene hacia nosotros como una enorme muralla azul. Ya no hay escapatoria. Cerramos los ojos. Nos tapamos la nariz. Y lo enfrentamos. Estamos dentro de la ola. Y despertamos.
Todo fue un sueño. Para algunos puede parecer una pesadilla. Para otros una señal, un mensaje, pero ¿cómo saberlo?.
Sueño recurrente
El mar es un tema recurrente en las tierras de Morfeo. Y últimamente muchas personas han soñado con un mar agitado y violento. Como un maremoto.
Es por eso que recurrimos a un profesional experto en el tema. El antropólogo social, psicoterapeuta y mediador Gestáltico, Patricio Medina, quien además es académico de la Escuela de Psicología de la PUCV.
Medina explica que desde la perspectiva de la psicología de la Gestalt, las imágenes que aparecen en los sueños son símbolos.
"Pero es un símbolo que difícilmente es descifrable, porque por un lado tiene un significante y por otro tiene un significado. En este caso el mar es un significante. Es decir, es la representación de algo, de un concepto o sentimiento que estaría oculto".
Mensaje existencial
En los sueños el significado es subjetivo y personal. Por lo tanto, el mar no representa lo mismo para todas las personas. "Lo soñado es una representación de un aspecto de la personalidad de quien sueña. El sueño es una proyección de la persona. Entonces todos los mares de las personas que sueñan son diferentes", aclara el académico.
Además, afirma que los sueños siempre son mensajes existenciales. "El soñar con este mar que crece y es atrapante, indudablemente es un mensaje existencial que es potente y de mucho sentimiento para quienes lo han soñado".
Y agrega: "En la vida cotidiana -despierta- que uno vive todos los días, se reprimen las emociones. La gente oculta lo que siente. Y lo oculta a sí mismo y también socialmente. Pero cuando el mar crece y te atrapa, lo que hay allí es angustia, y un poco de miedo y temor. Como para otra persona puede ser maravilloso estar en el mar con el todo y el infinito. O un desafío de la vida".
Sensibilidad social
A esto se suma la sensación de que en Valparaíso hay un ambiente bastante amedrentador con las alertas de tsunami. Alarmas, evacuaciones, y miedo a los grandes temblores que han habido.
"Eso tiene a gran parte de la población con temor y con miedo. Hay un problema ahí de salud mental. Entonces puede ser también que haya una provocación a través de los medios, que crea una sensación colectiva de temor hacia el mar, o hacia el futuro, y eso se llama angustia. La gran ola es la representación de la gente de su propia angustia", concluye Medina.
Quien recomienda que si alguna persona siente que ese sueño es muy preponderante y significativo, y que necesita trabajarlo o interpretarlo, debería buscar una ayuda de expertos.