La reja que acabó con la rutina festivalera de Siete Hermanas
Vecinos perdieron su palco preferencial, desde donde durante décadas pudieron ver y escuchar el certamen viñamarino.
Hay tradiciones que se van perdiendo. Esas imágenes de grupos apostados en lo alto del cerro mirando gratuitamente el show de Viña del Mar, son cosa del pasado, al menos desde hace unos cinco años.
Pasadas las 21.00 horas, ya se empezaba a reunir el contingente festivalero del condominio Siete Hermanas para buscar su puesto y poder disfrutar, a la distancia, de la música en vivo. Esos planes fueron cercados agresivamente por una reja de alambre de púa que prohibe el acceso hasta esa zona.
El público "sietehermanino", y algunos invitados que llegaban con el dato, se reunían sagradamente en un pasaje del cerro que ofrece una vista directa al escenario, por el costado de donde se alojan los edificios. Allí, tendían sus mantas, servían el picoteo y disfrutaban de la música, pero ese panorama ya no es posible. Ahora se puede escuchar el ruido de fondo, pero sin la imagen, la gente prefiere verlo por televisión.
"Bajada solo por Potrerillos. No insista, gracias" se puede leer apenas en un informal letrero que avisa que el paso está prohibido. Al otro lado de la reja coronada con alambre de púa, un guardia de seguridad te hace una señal con el dedo desde su caseta para indicarte que hay que darse la vuelta.
"Antes se veía cualquier gente acá. Cuando estaba el canal nacional a cargo del Festival se podía ver. Los cabros hasta arrendaban sus departamentos. Cuando les quitaron la concesión se terminó esto", recuerda Omar Aravena, residente del condominio desde el año 1981.
El viñamarino, cuestiona la decisión de tapar el paso a los curiosos, argumentando que nunca hubo desórdenes ni percances.
"Antes nos dejaban pasar, nunca hubo problemas ni disturbios", aduce.
Aparte de perderse el Festival, los vecinos dicen sentirse encerrados con el cierre de su principal vía de conexión con el resto de la ciudad.
"Cierran ahí, pero dejan una pasada por Potrerillo; en la mañana solamente se puede bajar por ahí, pero hasta cierta hora, como hasta las 14.00, después de eso hay un cierre total y no se puede bajar por ahí. Ni siquiera nosotros los residentes de Las Siete Hermanas. Ahora queremos que termine luego el Festival no más para volver a la normalidad.", reclama.