Como pocas veces se la ha visto, Miguel Ramírez se volvía loco con cada cobro del juez al ver cómo la octava victoria consecutiva jugando en casa se les escapaba. El técnico, una vez consumada la victoria, elogió el juego mostrado por Copiapó, asegurando que, "tuvimos un rival que no se estaba jugando opciones algunas a algo importante, como lo estábamos haciendo nosotros, y por ello tuvieron mucha más fluidez y tranquilidad. Copiapó nos planteó un partido bien cerrado y no fue fácil. El ordenamiento que ellos tuvieron, no nos permitía a nosotros ingresar con la facilidad que normalmente buscamos".

Agregó Ramírez que, "cuando quedamos con un hombre más, pusieron dos líneas de cuatro y un solo delantero, entonces se hizo mucho más difícil el poder ingresar. Ahí nosotros tuvimos que modificar, abrimos más la cancha, pero tendíamos a jugar hacia el medio".

El haber encontrado el gol en el último suspiro, reveló la que según el "Cheíto" es una de las grandes fortalezas verdes, indicando que "en la insistencia está nuestro fuerte y tenemos jugadores que están pasando por un muy buen momento".

Puntos perdidos

Ya encumbrados en la zona de liguilla, el DT recordó los partidos en que no ha podido quedarse con la victoria, sosteniendo que "de los partidos que nosotros hemos jugado, lamento ese partido con Serena, porque esos dos puntos nos podrían haber ayudado mucho más, y sobretodo lo que hicimos contra Valdivia, pero ahora estamos pasando por un buen momento, y nos pudimos quedar con tres puntos que son valiosos".