Nicolás Arancibia Bórquez
Por más que la ANFP haya resuelto que durante esta semana volverá la competencia oficial de fútbol, en Santiago Wanderers están lejos de asumir estos días como normales. Si bien es cierto que, según la programación entregada por el organismo rector de nuestro balompié, los verdes deberían recibir a San Luis de Quillota este domingo a partir de las 15.00 horas, lo cierto es que la contingencia social de nuestro país parece indicar otra cosa.
La dirigencia caturra, generalmente, ya tiene una planificación elaborada de cada uno de sus partidos de local, lo que les permite comenzar los días lunes con su normal proceso de venta de entradas, pese a que las reuniones de coordinación con la Gobernación y Carabineros se llevan a cabo los jueves. Los cierto es que, según reveló una fuente al interior de la institución, los regentes caturros, al menos hasta la tarde de ayer, ni siquiera sabían cuándo iban a poder juntarse con las autoridades regionales, entendiendo que la mayor preocupación de estas últimas está enfocada en lo que está pasando en las calles y no en la realización de un partido de fútbol.
Otro tema que urge en la interna del Decano, es la cantidad de aforo que se solicitará para el encuentro. En una situación normal, fácilmente se podría ver a más de 12.000 fanáticos caturros el domingo en el Elías Figueroa Brander, pero los porteños saben que albergar tal cantidad de gente es meterse en la boca del lobo. Por lo mismo, la dirigencia estaría evaluando la posibilidad de solicitar un aforo de 7.000 espectadores, pensando en el universo cercano a los 5.000 abonados con los que cuenta la institución, además de los 1.000 boletos de cortesía que, por temas comerciales, Wanderers entrega a sus auspiciadores.
No se descarta, de hecho, que el partido se juegue sin espectadores. La idea de la regencia es evaluar la contingencia social en los venideros días antes de tomar una decisión definitiva del caso.
Cambio de hotel
A través de un comunicado, la barra Los Panzers de Santiago Wanderers anunció hace un par de días estar en contra del regreso del fútbol, recalcando que "no dejaremos que ningún jugador toque la cancha". Por lo mismo, desde la interna del Decano prefieren evitar problemas y en caso de que se lleve a cabo el partido del domingo ante San Luis, el plantel dirigido por Miguel Ramírez no concentrará en el hotel Diego de Almagro del centro de la ciudad.