Iglesia San Francisco iniciará en octubre su tercera reconstrucción
Con tres fuentes de financiamiento: Consejo Regional, Subsecretaria de Desarrollo Regional y Ministerio de Obras Públicas, por un total de $7.600 millones, el templo característico del cerro Barón renacerá desde la cenizas este 2020.
Luego de tres incendios, siendo el último en el 2013 y que significó una pérdida del 80% de la estructura del templo, la iglesia San Francisco iniciará un nuevo proceso de licitación para reconstruir nuevamente el edificio que es monumento histórico.
El Consejero Regional, presidente de la comisión de ordenamiento territorial, Manuel Millones detalló que "este año con un financiamiento de $7.600 millones de pesos y con las voluntades políticas a favor, hubo disposición para invertir en la recuperación de esta obra emblemática para Valparaíso".
Millones agregó que "lo interesante de este proyecto es que se dará inicio en una fase distinta, llamada pago contrarecepción, es decir que se licita la obra junto con el diseño, lo que acorta los plazos y minimiza errores, pues la misma empresa que construye es la que hace el diseño".
El consejero recalcó que la inversión podrá ser posible debido a un plan de gestión especial que abra a la comunidad los salones del convento.
El templo será administrado por una corporación pública-privada, donde estará la iglesia, los hermanos de la congregación, la comunidad y las universidades. Esta nueva figura administrativa permitirá hacer actividades culturales, artísticas y sociales.
Milagros Aguirre, arquitecto y representante de la comunidad indicó que la modalidad de puertas abiertas "permitirá que la comunidad participe, se pueda mantener y preservar la inversión patrimonial, además de desarrollar actividades culturales y turísticas muy importantes para el cerro Barón".
Aguirre comentó que la Corporación está en etapa de formación legal y estará compuesta por vecinos del sector y representantes de las universidades. "La idea es hacer conciertos, actividades de patrimonio y muchas cosas que debemos empezar a gestionar".
Muros cortafuegos
El director de Arquitectura del MOP, Manuel Pedreros, indicó que al tratarse de un monumento histórico el proyecto de restauración del templo e instalaciones de la Iglesia San Francisco posee complejidades, pero a la vez genera satisfacción porque se devuelve el valor de un edificio emblemático.
"Este es un templo que posee muchos daños y las obras deberán considerar la recuperación de elementos que ya no existen en las tres grandes edificaciones que se emplazan en el predio. Al diseño que se estaba ejecutando el 2013, cuando ocurrió el tercer incendio, se agregaron muros cortafuegos hacia todos los predios vecinos de manera de asegurar un adecuado cumplimiento a la norma y también resguardando el carácter patrimonial de la edificación. Esta es una solución que deberá ser aprobada por el Consejo de Monumentos Nacionales", detalló el representante del Ministerio de Obras Públicas.
Los plazos
El llamado a licitación del proyecto fue publicado el 30 de diciembre y de acuerdo al cronograma, a finales de mayo del 2020 se tendría que abrir la licitación con las ofertas que lleguen y ya en octubre se adjudiquen las obras con un contrato de construcción.
Finalmente el plazo de ejecución del proyecto es de 730 días, por lo tanto a finales el 2022 debería estar entregada la obra a la comunidad.
Desgaste y entrega
Raúl Allimant, superior franciscano a cargo del convento e iglesia San Francisco de Valparaíso, manifestó su satisfacción por tener aprobados los recursos para la restauración.
"Se acabarán los dolores de cabeza, ya que en este período siempre hubo gente que quiso invadirla, robar y hacer daño. Ha sido muy desgastante todo este tiempo en que ha estado en estas condiciones el templo, pero también está la alegría de quienes valoran la presencia de nosotros en el barrio", señaló Allimant.
El franciscano recuerda que "yo acá me ordené de diácono, de sacerdote, vine a pedir aquí entrar a la orden yo soy porteño y todo esto es un espacio muy significativo para mí".
Respecto a los incendios de los cuales han sido víctimas, Allimant sostuvo "todo esto tiene dos caras, pues nunca un incendio se ha iniciado dentro de la comunidad. Por eso nos sentimos víctimas de todo esto, pero ahora ya viene la reconstrucción".
Los incendios
- 4 de febrero de 1983: A las 14.00 horas el fuego comenzó en la sala del coro de la iglesia, debajo del campanario. Según un informe de Bomberos, el siniestro fue "provocado por elementos incendiarios". Testigos vieron a dos jóvenes con pasamontañas en el atrio, los que luego escaparon por la puerta del templo.
-2 de septiembre de 2010: A las 11.45 horas el siniestro destruyó totalmente la nave en medio de obras de restauración que serían entregadas en 13 días. Partió por una chispa de una soldadora que cayó sobre material combustible. El sacerdote Javier Mac-Mahon, cuando celebraba un misa, vio llamaradas en el cielo raso.
- 2 de agosto de 2013: El fuego se inició cerca de las 04:30 de la madrugada. En minutos arrasó completamente las naves y se propagó al convento, destruyendo en un 70% las instalaciones contiguas al templo. Las llamas iluminaron el barrio y se apreciaron grandes lenguas de fuego que salieron por la torre del campanario.
Respecto a la mala suerte que ha tenido la iglesia, los hermanos franciscanos no creen en teorías de maldición, aduciendo que la reparación de 1983 no se hizo con materiales acorde a la durabilidad y características del edificio original. Esto, según ellos colaboró en el rápido consumo de la iglesia en los siniestros posteriores.
"Al diseño que se estaba ejecutando el 2013, cuando ocurrió el tercer incendio, se agregaron muros cortafuegos".
Manuel Pedreros, MOP
Historia
Eduardo Provasoli Pozzuli, notable arquitecto y sacerdote franciscano, nacido en Milán en el año 1847, llegó a Chile en 1875 a encargarse de numerosas obras de la congregación y en 1890 comenzó a levantar la fachada nueva del San Francisco del Barón. Anterior a esta construcción, el lugar era un convento y casa de formación . Antecedentes históricos obtenidos del archivo Franciscano en base a la recopilación vertida en la publicación "Convento del Barón" cuyo autor, el Padre Rigoberto Iturriaga, investigó los eventos ocurridos desde 1842 y hasta 1985. Él mismo fue protagonista de la historia pues estuvo asignado a esta casa de formación durante 5 años siendo superior en estas fechas y autor de numerosas reformas al convento entre las que relata la recuperación y liberación del corredor del convento que había sido cerrado para ubicar una academia de señoritas estudiantes de mecanografía. En 1856 se realiza un censo en el país, por lo que el Intendente solicita cooperación y datos sobre la casa. En respuesta a un oficio del intendente, se describe al templo con muros de adobe sobre cimientos de piedra y el techo con tablas de alerce, tiene 40 varas de largo, 17 de ancho, el grosor de sus muros es de 1 vara tres cuartos, tiene 10 varas de alto; es de 3 naves con 10 ventanas, 3 puertas grandes de pino y tiene 3 altares de orden corintio aun sin dorar. En 1892 el superior pide al Sr. VonBischoffshausen, comerciante porteño, que haga traer de Alemania 3 campanas de acero, que pesen 736, 552 y 368 kilos, respectivamente, y queden las notas mi, sol y do. Llevarían la inscripción siguiente: "Convento de Misioneros Franciscanos del Barón - Valparaíso 1892". Luego en junio se firma un contrato con el relojero José Picconi para que importe e instale un reloj apropiado para la torre del Convento del Barón de reciente construcción.