En la discusión respecto a la Reforma Previsional si de algo se ha hablado muy poco ha sido de la importancia que tiene el mercado laboral en las pensiones. Un mercado laboral de mejor calidad lleva a mejores pensiones, por tanto, si no mejoramos el primero difícilmente tendremos mejoras en lo segundo. El tardío ingreso al mercado laboral (29 años en promedio), la baja densidad previsional (cercana al 50%), los bajos salarios (la mediana ronda los $400.000) y una tasa de ocupación informal próxima al 30%, son algunas cifras alarmantes que el mercado laboral padece y que deben ser resueltas si queremos mejores pensiones a futuro.

La discusión hasta ahora se ha centrado acerca de a dónde irá el 6% de cotización adicional. Sin embargo, es también prioritario darle sustentabilidad al sistema.

Si somos incapaces de dar solución a los problemas que el mercado laboral evidencia, ¿qué explicación daremos cuando este 6% - más allá de adónde vaya - no alcance para mejorar las pensiones?

Marcelo González C.

Fundación para el Progreso

Siendo las 19:00 horas comienza la jornada diaria de destrucción. Precaución a quienes circulan por Pedro Montt, Plaza Victoria y Bellavista, nuevamente aparece la manada de encapuchados, barricadas y piedras. Nada nuevo bajo el sol, parece que la situación ya es parte de lo cotidiano.

Sin duda que el sentimiento de rabia e impotencia inunda a todos quienes viven y transitan a diario por Valparaíso. Ciudad que tuvo algún día gran trayectoria y legado, pero que vemos como ha caído en manos de quienes gozan con la destrucción y mediocridad, mismos quienes el éxito y el progreso pareciera molestarles.

Valparaíso desde sus albores se ha caracterizado por tener una identidad particular, distinta al resto de las ciudades de Chile con sus planos de dameros y plazas de armas, Valparaíso siempre ha abrazado el concepto de libertad, entendimiento y la tolerancia, considerando lo anterior: ¿Hasta cuándo debemos seguir tolerando ver a Valparaíso ser la entretención de los vándalos?

Para considerar

Con fecha jueves 23 del presente mes fui invitado a una ceremonia de graduación a las 20:30 horas en la calle Bellavista me encuentro con una turba de aproximadamente 100 "desobedientes" sociales atacando a carabineros y logré traspasar hacia la avenida Brasil y en el contexto colapsé con las consecuencias que conlleva este ataque a la policía.

Posteriormente fui asistido por carabineros los cuales me brindaron atención, me subieron al bus para contenerme, ya que mi estado de salud era crítico; la policía me puso gotas en los ojos y agua para beber.

La verdad fueron un apoyo importante, carabineros se portó a la altura, me tuvieron unos 10 minutos, siempre preocupados por mi salud. Tengo poco más de 70 años, solo agradecimiento para la policía apostada en el sector.

Mauricio Faúndez Peric

Fundación para el Progreso

José Antonio Herrera Cortes