Polémica por cifras de fallecidos y certificados
El tuit de una periodista instaló la idea de que el número de muertos que entrega el Gobierno no es tal. Colmed explica el vacío en las defunciones.
"Según los datos entregados por el Registro Civil, a una solicitud de transparencia por el abogado Jorge Álvarez (quiso decir Juan Andrés, a quien iba dirigida la carta), entre el 3 de marzo y el 29 de abril 2020, en Chile murieron 4.201 personas por 'enfermedad respiratoria'. A esa fecha, Minsal registraba 209 fallecidos por COVID-19". El tuit de la periodista Alejandra Matus (@alejandramatus), que instaló la idea de que el Gobierno podría estar ocultando el número de muertos por coronavirus, no dejó indiferente a nadie.
De hecho, la vocera de Gobierno, Karla Rubilar, salió al paso y le respondió a través de la misma red social: "El organismo público que entrega la información oficial de las defunciones y las causas de muerte es el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS) del ministerio de Salud y no el Registro Civil".
Causas de muerte
Durante la jornada de ayer, Matus insistió en que el Registro Civil es "la fuente primaria de información sobre defunciones y causales de muerte", y que pese a "sus imperfecciones", tiene la misma validez que el DEIS y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) para solicitar este tipo de datos.
El director nacional del Registro Civil, Jorge Álvarez, también respondió a la polémica con un video, en Twitter: "La información que entregó el servicio de Registro Civil e identificación, se refiere solo a los registros administrativos, información que proviene de los certificados médicos de defunción que se presentan al momento de la inscripción".
El director agregó que dicho certificado consigna "causa inmediata, enfermedad o condición que produjo directamente la muerte; causa originaria A, enfermedades, lesiones y tipos de accidente, suicidio u homicidio que ocasionó la causa inmediata; causa originaria B, que se completa en el caso que existan más causas originarias y los estados morbosos concomitantes".
El organismo a su vez, emitió una declaración pública, en la que detalló que la metodología que se utilizó para extraer los datos, fue "buscar en la base de inscripciones de defunción", los cuatro conceptos contenidos en la consulta: enfermedad respiratoria, COVID-19, neumonía o pulmonía.
Asimismo, aclaró que la información entregada "incluyen todas las causas (no sólo la inmediata) y, por ende, contienen no sólo a las personas que fallecieron en forma directa por causas respiratorias".
Certificados
El presidente del Colegio Médico (Colmed) de Valparaíso, Ignacio de La Torre, explica que la solicitud realizada a transparencia fue de patologías respiratorias, porque "podría estar presente en ese grupo, un sinnúmero de personas que fueron indicadas como causa de muerte una falla respiratoria o una patología respiratoria y sin embargo, podría estar entre la causa escondiendo que el origen fue el coronavirus".
Esto se debería a que los certificados de defunción se emiten con la información que se dispone en el momento en que el paciente fallece. "Producto de todo lo que involucra el no poder darle sepultura a una persona, tú podrías realizar el certificado médico con la información que tienes disponible en ese momento, y luego se debería generar una rectificación de la causa de muerte", dice De La Torre.
No obstante, esto no ocurre porque "puede ser engorroso". De esta forma, el presidente de Colmed Valpo comenta que "algunas personas que fallecieron y no tuvieron un examen de COVID-19" pueden quedar fuera, "con un certificado de muerte que no es capaz de descifrar la causa de la falla respiratoria que se produjo".
Para graficarlo, el vocero pone el ejemplo de un abuelito. "El móvil del SAMU llega a constatar su fallecimiento, se le toma una muestra PCR para saber si el abuelito falleció o no de coronavirus, pero cuando tenemos el resultado, ya se le hizo el certificado de defunción y todos los trámites y acciones para darle sepultura", explica.
Vacíos en llenado
Ignacio de La Torre agrega que "en algunos países rehicieron y reestudiaron a todos los fallecidos, para tener la certeza si había sido el coronavirus que provocó el fallecimiento", pero que los instructivos para el llenado de los certificado de defunción en Chile, "generan ciertos vacíos".
De la Torre concluye que "el coronavirus puede haber sido la causa originaria, pero no necesariamente queda registrado en los certificados de defunción".
La consulta a fuentes secundarias
Tomás Lagomarsino, médico y académico de la Universidad de Playa Ancha (UPLA), sostiene que hay tres razones que motivan a la gente a buscar fuentes secundarias. "La primera, es la falta de concordancia de Chile con respecto a otros países que tienen cifras mucho más altas de fallecidos; la segunda, la divulgación extraoficial de una serie de certificados de defunción de personas que habían fallecido por COVID-19 y que no han quedado explicitados y la tercera, la legitimidad del cuestionamiento, porque estamos en un estado de excepción constitucional y en el contexto de una pandemia, se pueden restringir derechos individuales", manifiesta.