Viñamarino en Nueva Zelanda
Luego de escribir una amplia carrera como jugador, Francisco Deformes fue en búsqueda de nuevas experiencias llegando a una de las cunas del rugby.
La relación del rugby con Nueva Zelanda no es algo nuevo, ni menos pasa desapercibido. A diferencia de lo que sucede en nuestro país, los pequeños talentos deportivos neozelandeses sueñan con jugar con la ovalada, dando vida a la nación de esta disciplina. En medio de estos movimientos está Francisco Deformes, viñamarino que se desempeña como entrenador de scrum de Hawke's Bay en la Mitre 10 Cup -el campeonato nacional a nivel de provincias del país oceánico- donde el exseleccionado nacional, ha podido desarrollar su faceta desde la banca.
Su carrera partió en el Colegio Mackay, para luego vestir la camiseta de la selección chilena. Su carrera vino de la mano con sus estudios de Educación Físicay las oportunidades aumentaron cuando Inglaterra apareció en el horizonte y se desempeñó como jugador en su Segunda División.
"Cuando terminé de jugar en 2016, me tomé un par de meses sabáticos, fui a Nueva Zelanda a visitar a un amigo chileno. Se me dio la opción de entrenar un club amateur luego que él me dijera que no tenían entrenador, no lo hice por plata, sino para aportar a este proyecto", relata Francisco sobre sus primeros pasos al mando de un club.
A la cancha
A diferencia de nuestro país, los planes en Nueva Zelanda están definidos. La obediencia de la gente y las medidas del Gobierno hicieron que en las últimas dos semanas se viva una vuelta progresiva a la normalidad. Sin ir más lejos, el nivel amateur de rugby retorna esta semana a los entrenamientos para luego dar paso a los clubes que disputan la Copa Mitre 10 -que se disputa a nivel provincial- y el Súper Rugby, que dada la pandemia, solo contará con Nueva Zelanda, dejando de lado a otras naciones. "Nuestro primer partido en el Mitre 10 está fijado para el 11 de septiembre, tenemos que realizar la pretemporada y la temporada oficial parte en julio", dice el exCóndores, agregando que "el principal objetivo es ganar la competencia, el año pasado llegamos a la final del championship y la idea este año es llegar y ganar esa definición".
La visión nacional
En Nueva Zelanda, el deporte principal es el rugby, está en la cultura. La gente no se imagina hablar de rugby sin pensar en Nueva Zelanda o en los All Blacks que es su equipo nacional. "Es un país agradable, al ser más chico no es tanto el problema como en Chile que a veces en la zona central hay un desarrollo mayor de algunos deportes y los extremos están aislados, acá no se ve eso", apunta el viñamarino.
Sobre el escenario local de la disciplina, el exseleccionado saca sus primeras conclusiones y así, agrega que "en Chile el rugby siempre ha sido un deporte amateur, más que por un tema de si al jugador le pagan o no, siempre se ha visto como un hobby de fin de semana. Se compite y todo, pero el enfoque que se le da es más social que de otro aspecto, aunque hoy creo que está cambiando".
Y agrega: "Tengo harto contacto con la federación chilena y siento que se está avanzando a la dirección correcta, ahí también tiene que venir un cambio de mentalidad del jugador, entrenador, dirigente, preparador físico, de todos. Vamos a tener que profesionalizar más allá de que nos paguen o no, tiene que ser desde la actitud y dedicación que se le pone a la actividad, ese será el gran cambio, ojalá que pase", dice el actual entrenador.
Foguearse afuera
Si bien en lo deportivo, Francisco la tiene clara, sus ideas también son fijas en su crecimiento como entrenador. Aunque ama Chile, asegura que las ganas de aprender en el extranjero son más fuertes. "Obviamente soy chileno y quiero mucho a mi país, siempre voy a tratar de ayudar y estar en contacto con el rugby nacional; si me toca volveré, pero en el corto y mediano plazo quiero desarrollarme afuera", apunta el deportista.
Sofía Navarro Martínez
La Estrella de Valparaíso