Nicolás Arancibia Bórquez

El 23 de diciembre del año 2019, Everton adelantaba un regalo de Navidad para todos sus hinchas. Patricio Rubio, delantero que la rompió con la camiseta de los oro y cielo entre los años 2017 y 2018, volvía a Viña del Mar para una segunda etapa en el club, luego de un breve y poco fructífero paso por la Universidad de Concepción.

Los mismos fanáticos que hace tan solo unos meses festinaban con el arribo del experimentado delantero formado en Colo Colo, estuvieron con el alma en un hilo durante las últimas horas, ya que diferentes medios especializados de Perú hacían eco del interés de Alianza Lima por contar con los servicios del "Pato", vinculándolo directamente con Mario Salas, entrenador que arribó hace tan solo unas semanas al cuadro de la capital incaica.

Recordemos que el "comandante" compartió plantel con el exfutbolista de Universidad de Chile en Barnechea, logrando no solo el ascenso a Primera B con el cuadro capitalino y realizando muy buenas campañas en el fútbol de ascenso, sino que también, aquel conjunto erigió a Rubio como su gran figura, llevándolo a dar el paso a firmar por Unión Española, equipo con el que posteriormente se coronó como campeón y goleador del fútbol chileno.

Pese a todo el contexto y las ganas que el propio atacante habría tenido para volver a jugar en el balompié extranjero tras su paso por México, la avanzada edad de Rubio (31 años) y los seis meses de contrato que todavía lo vinculan a los oro y cielo, habrían sido la piedra de tope que los limeños encontraron a la hora de analizar la opción de su fichaje. De hecho, desde el propio cuadro ruletero, aseguran no haber recibido ningún tipo de propuesta formal de parte de Alianza Lima.

El elegido

Desde que Mario Salas volvió al fútbol peruano (recordando que previamente tuvo exitoso paso por el Sporting Cristal), es que los medios de aquel país han hecho énfasis en los deseos del viñamarino por contar con un delantero chileno. Además del nombre de Rubio, Andrés Vilches, atacante de Unión La Calera, y Javier Parraguez, artillero de Colo Colo, habían aparecido como las opciones que el "comandante" barajaba para reforzar su ataque.

Pese a todos los rumores, todo parece indicar que el elegido finalmente será el argentino Jonathan Herrera, actual jugador de Central Córdoba, y que se espera arribe el viernes a suelo peruano para concretar su fichaje.

6 meses de contrato le quedan al delantero con Everton. Los oro y cuelo no han recibido ofertas formales.

2 goles suma el formado en Colo Colo durante la presente temporada en ocho partidos disputados.

Más de tres meses habían pasado desde la última vez que el plantel de Wanderers se reunió presencialmente. Es cierto, a la práctica de ayer no asistieron aquellos jugadores que residen en comunas que están bajo cuarentena, pero de todos modos la primera sesión de entrenamiento grupal desde que el COVID-19 brotó en nuestro país, fue considerada como todo un hito por el primer equipo caturro.

Lejos de estar en un contexto de normalidad, los futbolistas del Decano, liderados por un cuerpo técnico que contó con la presencia de Miguel Ramírez, debieron entrenar a varios metros de distancia entre ellos, enfocándose en labores físicas sin toque de balón, y siempre sobre campo abierto, ya que el Centro de Alto Rendimiento José "Gallego" Pérez aún no está habilitado para su utilización.

Según se pudo averiguar, los jugadores se mostraron con ánimo y muy atentos a respetar los protocolos de la Fase 1 del reintegro a la competencia, lavando bien sus manos tras la sesión, utilizando mascarillas y despidiéndose cada uno en su automóvil particular.

Recordemos que el protocolo del club consta de tres fases. La primera, obliga a los jugadores a llenar una encuesta preventiva, a realizar entrenamientos individuales y a no llevar a cabo sesiones de más de media hora. La siguiente etapa involucra prácticas grupales y colectivas; mientras la fase final conlleva realizar partidos amistosos a puertas cerradas.

3 son las fases que contempla el reglamento de los porteños antes de volver a jugar de manera normal.