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Sigue sin culpables el brutal homicidio de Vania Zúñiga

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El próximo 28 de agosto se cumplirán tres años del brutal homicidio de Vania Zúñiga Latapiatt, la madre de 27 años que fuera encontrada sin vida y con claros indicios de haber sufrido un martirio al interior de su casa ubicada en la parte alta de Miraflores.

No sólo la brutalidad de quien protagonizó este crimen que aún no tiene culpables fue lo que impactó a la comunidad, también su frialdad, dado que la golpiza y las heridas cortantes provocadas en la víctima fueron presenciadas por la menor de los dos hijos de Vania, una pequeñita de entonces 1 año y 5 meses.

Los duros detalles del homicidio de la adolescente Ámbar Cornejo Zúñiga conocidos este lunes durante la audiencia de formalización del hasta ahora único imputado por este alevoso crimen, Hugo Bustamante Pérez, provocaron especial dolor y empatía en el padre y la hermana de Vania Zúñiga.

Así lo reconoce el progenitor de la joven, quien pese a encontrar se en Santiago, impedido de poder venir a la zona para requerir información del caso de su hija por la pandemia, se mantiene en permanente vigilia esperando novedades que apunten a un responsable.

"Es inevitable revivir lo que le pasó a mi hija. La justicia falla de manera tan grave, yo he perdido la esperanza, hemos esperado tanto tiempo por justicia y ya pronto se cumplirán 3 años desde que mataron a Vania y aún no hay un culpable", comentó Iván Zúñiga.

A cargo de la investigación del homicidio de Vania Zúñiga, el fiscal Fernando Hood informó que la semana pasada tomó contacto con la querellante en esta causa y que existe una diligencia pendiente que se relaciona con los teléfonos celulares incautados.

Familia de H. Bustamante abandonó casa donde se cometió el crimen de Ámbar

La vivienda ubicada en calle Covadonga en Peñablanca se encuentra cerrada con una cadena. Rechazo de vecinos obligó al traslado.
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Priscilla Barrera Ll.

"Familia Bustamante fuera del barrio", se lee en uno de los tantos carteles que vecinos de la calle Covandonga en Peñablanca, han instalado en los frontis de sus casas para manifestarse en contra del horrible homicidio de la adolescente de 16 años Ámbar Cornejo Llanos.

A tanto llegó la molestia colectiva que se originó tras conocerse que la joven que estuvo desaparecida desde el 29 de julio y que fue asesinada ese mismo día en la casa de Covadonga 641, donde vivía su madre y el imputado, Hugo Bustamante Pérez, que muchos las emprendieron contra la casa que ocupaban hasta este lunes familiares del imputado.

Carteles, pedradas y hasta zapatos lanzaron en contra de la vivienda principal que se ubica en el mismo terreno donde se encuentra la mediagua que compartían la madre de Ámbar y su pareja, Hugo Bustamante.

De ahí que, tal como lo declarara a TVN Valparaíso, la hermana de Bustamante, no tuvieron otra opción que abandonar el barrio donde se crió.

"Tuve que llevármelos a todos, arrancar, yo entiendo a los vecinos, yo soy nacida y criada aquí, y por la culpa de este infeliz (Hugo Bustamante) tenemos que salir arrancando (...) Hace 15 años atrás, cuando él hizo la otra maldad, yo lo maté y lo sepulté".

La hermana de Bustamante aseveró que la madre de Ámbar y pareja de su hermano, que hasta ahora mantiene su calidad de testigo en este horrendo crimen, sabía de estos hechos.

"Es cómplice, la mujer sabía, eso que ella no sabía es mentira, no la dejen sin castigo porque ella sabía, ella participó, conociendo como conozco a mi hermano, ella participó", aseveró la mujer en declaraciones a TVN.

ámbar presente

Al ingreso de calle Covadonga, el frontis de la última casa donde vivió la joven de 16 años se ha convertido en las últimas semanas en un punto de encuentro para la reflexión y el recuerdo. No hay persona que no se detenga un segundo para encender una vela, orar, persignarse o simplemente meditar en silencio.

Peatones y automovilistas se detienen ante el lugar que honra la memoria de Ámbar Cornejo, fotografías de la adolescente, globos blancos y morados e incontables carteles que demandan justicia y un nunca más.

"Esta calle era tranquila, hasta un poco solitaria, pero ahora, imagínese, recordada siempre por este crimen tan terrible", comenta una vecina que vive hace 40 años en este barrio.