La Constitución y el supermercado
Estamos en plena campaña del próximo plebiscito, pero lo que usted está votando concretamente es avalar un nuevo congreso, de ninguna forma la pregunta es tener una nueva constitución o no, y solo lo real y concreto es que usted es víctima de un escenario ideal para el error, tal como la dueña de casa lo hace al asistir de compras a un supermercado.
Tal como el retail, le pone las ofertas al inicio del ingreso principal y el pan en la parte final del local, usted está siendo parte de una jugada de marketing.
Para su tranquilidad, la constitución se puede modificar por artículos siempre, cada día y en cada minuto, si es que su diputado trabaja para ir perfeccionando y actualizando la Constitución.
De la Constitución de 1980, ya poco queda, y la Constitución actual es llamada la Constitución del año 2005. Su texto original contenía 120 artículos y 29 disposiciones transitorias. Tras la reforma de 2005, se autorizó a fijar su texto refundido, coordinado y sistematizado mediante un decreto supremo, el cual fue firmado por el Presidente Ricardo Lagos y sus ministros de Estado, conteniendo 129 artículos y 20 disposiciones transitorias A marzo de 2020, posee 147 artículos y 32 disposiciones transitorias. Así la Carta Magna se va modernizando acorde a los nuevos tiempos, ya que en la misma Constitución están las normas para su modificación, de forma segura, clara y transparente.
Así las preguntas Rechazo y Apruebo no indican querer modificar o no la Constitución, porque ambos grupos están en plena sintonía con hacer cambios a la Carta Magna, entonces son dos caminos válidos, ya que siempre se debe ir modificando y actualizando artículos. La segunda pregunta sobre Constituyentes Totales o Comisión Mixta es solo ver el tamaño del nuevo Congreso que se desea implementar, ya que son los mismos políticos los que tienen el sartén por el mango, para postular y distribuir los escaños.
La metodología es la misma que el supermercado: hagamos que la dueña de casa se dirija por pan y en el trayecto la convencemos de que necesita cambiar la lavadora, la ropa, juguetes y cuanto hay.
Las familias se manifestaron por mejores pensiones, mejor salud, mejor educación, mejor justicia y seguridad ciudadana, y en el trayecto lo hacen creer que la Constitución es lo que usted necesita. El sistema está diseñado para sacarle dinero de sus bolsillos sin que se dé cuenta, en forma de impuestos, y los mismos que se definen como los que saben qué es lo que usted necesita, son quienes obtendrán el empleo de representarlo, ¿no le parece raro?
De todo corazón, no crea el cuento del tío, lo que necesitamos es que el diputado y senador, al cual usted le paga secretaria, oficina, automóvil, café, asesores y muchos asesores, haga bien su trabajo y que lo represente a usted. No vaya a comprar pan y regrese con el cuento de la nueva Constitución, porque eso lo pagan usted, sus hijos y sus nietos. Está todo planificado para que usted pise el palito.
Gonzalo Valdés Lufi
Ingeniero Comercial