Transportistas escolares preocupados por protocolo que emanó Mineduc
Los requisitos para esta asociación podrían ser complicados de cumplir debido a los costos de servicio y la difícil coordinación. Hablan voces locales en torno al complejo momento que han vivido en el contexto de pandemia.
Alison Muñoz - La Estrella de Valparaíso
Desde el Ministerio de Educación se planteó el retorno a clases 2021 de forma presencial a partir del próximo 1 de marzo, a pesar de la vigencia de la pandemia de COVID-19. Bajo este panorama, y con el fin de brindar garantías de seguridad y normas sanitarias, el ministerio elaboró una serie de protocolos sanitarios, los cuales complican al transporte escolar.
El escrito de 7 páginas entrega recomendaciones sanitarias que apuntan a la limpieza, desinfección y operación del transporte escolar para resguardar la seguridad de los estudiantes. Este documento debe ser entregado a cada uno de los responsables de los vehículos pertenecientes al Registro Nacional de Servicios de Transporte Remunerado de Escolares. Estas medidas promueven el lavado de manos, la toma de temperatura a la salida de clases, el previo aviso de los padres si son casos sospechosos, limpieza en superficies del vehículo y distanciamiento entre alumnos y conductores.
¿Quién financia estas medidas? En la comuna de Valparaíso, los transportistas escolares son alrededor de 150. Mientras que en la región son sobre 3 mil, quienes por la pandemia vieron detenidas sus labores debido a la cancelación de las clases presenciales en el país. Por lo que asumir los costos, tras más de un año sin trabajo, devela un difícil panorama.
Víctor Valdés, presidente de Asociación Gremial de Microempresarios de Transporte Escolar Valparaíso, comentó que las obligaciones van a aumentar, porque los niños se relacionan con muchas personas entre su casa y el colegio. Sumada a la cantidad de alumnos que también compartirán el bus, expone a conductores como a alumnos a contagios.
"No es conveniente para nosotros acarrear costos de sanidad extra, porque con la pandemia nos fue mal, ya que no contamos con ayuda estatal. Nos tuvimos que reinventar en otros rubros para no perder los vehículos, y no todos recibimos bonos", mencionó el presidente de la asociación.
Valdés explicó que este protocolo, que vendría siendo el mismo del año 2020, los pone en un predicamento al tener que correr con los gastos en artículos de limpieza, ya que no tienen certeza de que sea un regreso a clases normal, previendo un año escolar irregular. "No todos los niños irán durante la semana, por lo que los apoderados no van a querer pagar la mensualidad completa", aseguró Valdés.
Sin formación
Héctor Valdebenito Ojeda, transportista escolar de Valparaíso, indicó que hasta el momento no han recibido ninguna información oficial sobre este protocolo para la vuelta a clases. Valdebenito agregó que no hay ningún medio de comunicación oficial entre el gobierno y los transportistas escolares. Esto se debe a que no pertenecen al Ministerio de Transportes ni al MINEDUC.
El transportista asegura que todo este tiempo sin trabajo, los tiene en un limbo. Además, es inviable llevar a cabo todas las medidas y su financiación, incluso si aumentaran las tarifas, la situación económica familiar de los clientes no daría abasto.
"Se recomienda distanciamiento al interior del bus, para cumplir esa recomendación de la manera responsable, se debería bajar el aforo a lo menos a la mitad de la capacidad del bus. Una situación impensable, debido a que esto no permitiría el financiamiento del servicio, generando cero contribución para el transportista", alegó Valdebenito.
150 transportes escolares existen, aproximadamente, en la comuna de Valparaíso.