Los Selk'Nam: del genocidio al renacer
Los descendientes de esta etnia austral, también conocida como ona, se han reunido con el objeto de ser considerados como un pueblo originario.
Por Juan Guillermo Prado
Martín Gusinde, un misionero católico, originario de Austria, quien estuvo en Tierra del Fuego, entre 1918 y 1924, conoció a los aborígenes que poblaban el último rincón austral de América. Como consecuencia de su trabajo publicó en 1931 el libro "Los indios de Tierra del Fuego" y allí se refirió al genocidio del pueblo selk'nam u ona: "Debo revelar ahora la imagen repugnante de la matanza sistemática de esta magnífica tribu de indios llevada a cabo por blancos codiciosos. ¡En verdad, no es un deber agradable! Tengo el coraje para presentar los hechos manteniéndome fiel a la verdad. Todos preguntan, asombrados, por las causas que han reducido en el lapso de cincuenta años a este pueblo vital, de aproximadamente 4.000 personas, a apenas cien sobrevivientes…. ¡Los derechos humanos más sagrados fueron pisoteados con la más brutal violencia! Una fiera jamás actúa contra sus congéneres con la ferocidad con la que aquellos blancos se comportaron con nuestros indios. Estas líneas son una eterna acusación contra aquellos cazadores de hombres que despiadadamente asesinaron al pueblo selk'nam".
Ya, en 1882 el periódico Daily News de Londres en un artículo indicaba: "Se piensa que la Tierra del Fuego sería adecuada para ganadería, pero el único problema en este plan es que, según parece, sería necesario exterminar a los fueguinos"[selknam].
La actividad ganadera comenzó en 1878 y con ello la aniquilación de los aborígenes australes. Aunque antes se había descubierto oro y esto motivó la muerte de algunos indígenas. Pero, las cacerías humanas comenzaron con los estancieros y ganaderos que contrataban asesinos a sueldo, a quienes les pagaban en libras esterlinas por cada crimen. Fue tremenda la crueldad con que se procedió a aniquilar a quienes por milenios habían vivido en Tierra del Fuego.
Cazando Indígenas
Estas tierras carentes de autoridad y justicia fueron campo fácil para el genocidio. Curiosamente la primera matanza conocida la cometió Ramón Lista, capitán del Ejército argentino. Sucedió en la primavera de 1886, en la playa de San Sebastián. Al desembarcar la expedición, se encuentra con una tribu selknam. Intenta detenerlos, pero es imposible. El capitán ordena a los militares disparar y mueren 27 aborígenes y más tarde un joven que estaba escondido.
El autor español José María Borrero en su libro "Patagonia Trágica", publicado en 1921, describió una brutal matanza que sufrieron los aborígenes: "En cierta ocasión y en un punto de Tierra del Fuego, que se denomina Sprig Hill quedó varada una ballena. No se sabe si la marea la arrastró o si fue llevada de propósito. Lo cierto del caso es que fue vista primero por los perseguidores de indios y manipulada por ellos con toda clase de venenos. Descubierta la ballena por varias tribus de onas, y golosos como son éstos de la grasa del cetáceo, se dieron el gran banquete y allí quedó el tendal de muertos, como si se hubiera librado una gran batalla; se calculan en unos quinientos o más, fue un día de "caza máxima".
El mismo Borero describe otra carnicería en la playa de Santo Domingo en los inicios del siglo XX. El escocés Alejandro McLennan, conocido como "chancho colorado", invita a los integrantes de una tribu con la que había tenido dificultades a una comilona para sellar un acuerdo de paz, donde el vino abundaba. Cuando los aborígenes ya estaban borrachos, ordena a sus matones que dispararan. Murieron unos 300 onas.
A la Patagonia llegaron los sacerdotes salesianos en 1880, quienes crearon misiones donde los aborígenes fueguinos se refugiaron acorralados por el hambre y presionados por las bandas armadas de los estancieros que los asesinaban por el robo de ovejas. Pero, las misiones fracasaron por el contagio de pestes frente a las cuales los nativos no tenían anticuerpos. La última sobreviviente pura del genocidio de este pueblo fue Ángela Loij, fallecida el 28 de mayo de 1974.
La Opinión de Charles Darwin
Pero, los selknam no han desaparecido, entrevistamos a la escritora Hema'ny Molina, Presidenta Corporación Selk'nam Chile, quien estaba acompañada de Fernanda Olivares, directora, y Marcela Comte, tesorera de la entidad, afirmó: "En el genocidio al pueblo selk'nam hay varios actores, primero hay que decir que la mirada de los colonos y los Estados de Chile y Argentina hacia la población indígena fue influenciada por Charles Darwin, cuando pasó por el estrecho y conoció a los indígenas, se refirió a ellos como seres sin alma, sub humanos desdichados, casi animales. Estas palabras se quedaron en la retina de quienes llegaron a la zona.
Se suma a ello el hecho de que los primeros pioneros buscadores de oro, buscaban las tolderías para secuestrar a las mujeres, y más tarde, para la industria ganadera ovina. Las tolderías selk'nam representaban una molestia, ya que cortaban las alambradas y tomaban ovejas para comer, entonces comienza una verdadera cacería humana, para limpiar el territorio, esta acción fue avalada por los gobiernos de Chile y Argentina, pues los grandes estancieros tenían en concesión miles de hectáreas en ambos países. Entonces tenemos una acción con la intención de eliminar por completo un pueblo, un genocidio, en donde se perseguía a los selk'nam, se mataba a los hombres, mujeres mayores, y a las jóvenes y niños y niñas se les secuestraba para servicio doméstico, sexual, sacados de la isla. Más tarde en un intento por frenar las matanzas fueron llevados a la misión salesiana San Rafael en Isla Dawson.
También interviene en este genocidio la mirada académica purista que en los 1900 en adelante instala la visión del último o de casi extinto, o de vías de extinción que niega el derecho a los mestizos que crecieron insertos en la cultura, pero que se les negó el derecho a la identidad".
¿Cuántos son sus descendientes, dónde se ubican, cuántas organizaciones existen en la actualidad?
Es difícil dar una cifra, ya que al día de hoy, siguen llegando familias con argumentos de peso y comenzando sus estudios para determinar sus historias de sobrevivencia. Pero existe un referente, una cifra que arrojó el último censo que se realizó en Chile. En el ítem de consulta sobre Pueblos Originarios, existe el ítem "otro" y se da la posibilidad de especificar a qué pueblo se pertenece. 1.144 personas de declararon selk'nam en dicho censo
Actualmente, la comunidad Covadonga Ona cuenta con diez familias participantes de los procesos de estudios en sus diferentes etapas y cuatro familias que aún no comienzan su proceso.
Las familias selk'nam se encuentran en muchas ciudades de Chile, esto porque los y las niñas que fueron sacadas desde Tierra del Fuego fueron entregadas para servicio doméstico, para la minería, salitreras, casas de tolerancia de la época…siendo llevados lejos de la isla.
¿Existe interés por reconocer a los selk'nam u onas como pueblo originario?
Claramente existe una voluntad para ello, ya en la Cámara de Diputados, tuvimos el año pasado una votación de 148 votos a favor y ninguno en contra, es un claro indicador. Esperamos tener una acogida similar en el Senado, concluye nuestra entrevistada.
Las culturas de Tierra del Fuego se extinguieron para siempre en el transcurso del siglo XX como consecuencia de las matanzas organizadas por los ganaderos, de las epidemias traídas por los blancos y la imposición de nuevas formas de vida.