Francisca Palma Schiller

La sensación de libertad por Semana Santa ya están en el aire, como también las ganas por consumir los tan preciados productos del mar, los favoritos para estas fechas.

Así, al ser los platos predilectos por estos días, las caletas de la región ya han recibido a una importante cantidad de clientes y en ese sentido, resulta fundamental conocer el estado de los mariscos para evitar las tan temidas intoxicaciones, especialmente si se declara Marea Roja en ciertas zonas del país.

Por lo mismo, es clave saber en qué percatarse a la hora de comprar, como también conocer las recomendaciones de los expertos.

Ana Robles, enfermera de la Universidad de Playa Ancha y profesional de la Unidad de Pacientes Críticos del Hospital Clínico IST y de la UCI del Hospital de Quilpué, advierte que la Marea Roja es un fenómeno natural que se caracteriza por aumento excesivo de microalgas en el mar, las cuales pueden contener sustancias venenosas que, posteriormente, generan intoxicaciones en las personas que consumen mariscos contaminados.

"En Chile, por lo menos, existen tres tipos de venenos que están presenten en nuestras costas y que están en estas microalgas y moluscos: el amnésico, el diarreico y el paralizante. Son tres tipos de intoxicación a las cuales nosotros como población podemos vernos afectados y, en casos graves, incluso pueden provocar la muerte", afirma la profesional.

Respecto a cómo reconocer un marisco contaminado con Marea Roja, la experta precisó que, visualmente, es prácticamente imposible, porque no cambia el color, olor o sabor, además la cocción no elimina la toxicidad: la única forma de confirmar la presencia de veneno es con análisis de laboratorio. Por ello, recomienda adquirir productos solo en áreas autorizadas y en locales acreditados por el Ministerio de Salud.

Síntomas

Con este conocimiento, ¿a qué síntomas debemos estar atentos?

"En general, es dificultad para hablar; se puede enredar la lengua, puede sentir que le cuesta pronunciar, dificultad para respirar también, adormecimiento, hormigueo en la boca, en la lengua y una parálisis progresiva, entendiendo como la limitación del movimiento, por ejemplo, que le cueste mover los brazos, los sienta pesados, esos son síntomas generales", precisó.

Agrega que hay otros síntomas más específicos, como los gastrointestinales -dolor abdominal, vómitos, diarrea- y, en algunos casos, también se pueden presentar síntomas neurológicos dentro de las primeras 48 horas de ingesta, síntomas que si se agudizan, podrían provocar la muerte.

Autoridad sanitaria

Por otro lado, desde la Seremi de Salud también entregaron recomendaciones: "Tras la compra, mantenga los productos refrigerados -entre 0 y 5° C de temperatura- hasta su preparación. Consuma pescados y mariscos cocidos. Hierva los mariscos al menos por 5 minutos antes de consumirlos. Recuerde que el limón no cuece los alimentos", precisaron.

Además, aconsejaron cómo elegir correctamente pescados y mariscos.

"El pescado fresco debe tener olor fresco, a algas, propio a mar; musculatura firme a la presión del dedo, que retorna rápidamente a su condición normal; escamas adheridas y brillantes; branquias con laminillas separadas; globo ocular convexo que llena la cavidad orbitaria, cornea transparente e iris pigmentado. Los pescados de talla grande deben venderse sin vísceras en su interior y la cavidad debe encontrarse brillante", indicaron desde Seremia.

Añadiendo finalmente que, "el marisco fresco debe presentar buen aspecto general, vivos, con olor fresco o a algas. A la estimulación física los bivalvos (almejas, choritos, etc.) cierran la concha y los gasterópodos (lapas, etc.) se retraen dentro del caparazón. Los erizos deben tener sus púas móviles y erectas".