Fiscal por presunto asesino de Amanda: narcisista, sicopático y manipulador
Partió el juicio de joven magallánica encontrada estrangulada y apuñalada en su departamento de Valparaíso. La abogada de la familia dice que acusado ejercía poder sobre ella y pide la pena máxima. Fiscalía solicitó 23 años.
Belén Velásquez - La Estrella de Valparaíso
P oca empatía, desprecio hacia la víctima, rasgos sicópatas y narcisistas. Así describieron el fiscal Pablo Avendaño y la querellante Susana Gatica a Claudio Martínez, acusado del robo con homicidio en contra de Amanda Rojas, estudiante magallánica de 24 años que en diciembre de 2018 fue encontrada muerta en su departamento Placeres, Valparaíso. Por los hechos, el Ministerio Público pide dos penas que suman 23 años de cárcel, mientras que la querellante solicita la pena máxima: presidio perpetuo calificado.
Víctima y victimario, según los acusadores, mantenían una relación informal, por lo que particularmente la abogada Gatica pidió al Tribunal que se juzgue al acusado con perspectiva de género.
Desprecio de Amanda
En su apertura, el fiscal Pablo Avendaño dio cuenta que cuando el imputado mató a Amanda se encontraban en el departamento de ella, donde él la estrangula y luego le laceró la tráquea con un arma blanca, tras lo cual le robó tarjetas y se fue, sin pedir socorro a nadie, para días después comprarse ropa y comida con las especies de la víctima "demostrando un absoluto desprecio e indiferencia respecto de Amanda", dice el fiscal.
"Esta conducta de indiferencia y desprecio por la persona de Amanda, que demuestra absoluta falta de empatía del imputado, calzan perfectamente con características de personalidad acreditadas mediante pericias siquiátricas que destacan rasgos narcisistas del imputado en su personalidad y una tendencia sicopática del subtipo manipulador", sostuvo Avendaño, quien aseguró que desvirtuará la versión del imputado que aseguró que la víctima se autoinfirió lesiones.
Por su parte, la abogada Susana Gatica, que representa a la madre de Amanda, dio cuenta de una relación de "maltrato emocional y violencia económica", de la cual Amanda quería salir, pero "se dejaba llevar, se sentía atraída por el imputado", quien -a juicio de la jurista- ejercía poder sobre la víctima.
Él se aprovechaba
"La relación era tóxica, desigual, violenta. (...) Claudio se aprovechaba de Amanda quien quería más que una relación informal. Él no quería formalizar, de hecho le era infiel con otras mujeres, incluso hombres". "Amanda, debido a su autoestima disminuida, no terminaba la relación. (...) Él se aprovechaba de ella, le pedía que le pagara todo, le hurtaba dinero, usaba las claves de sus tarjetas", relató Gatica.
La querellante señaló además que al momento del crimen, Martínez actuó "a sangre fría" cuando Amanda estaba "entregada y confiando en él" y sin cómo defenderse en el departamento donde habían consumido alcohol.
Luego, el imputado -dijo Gatica- giró plata de un cajero y fue a comprar ropa y comida a Viña del Mar "mientras Amanda yacía muerta". "A Amanda se le quitó todo lo que tenía, lo que pudo aportar o ser", sostuvo la abogada, agregando que Amanda días antes le había comentado a una amiga que "quería dar vuelta la página, sanar y sentirse valiosa".
Depresión
Al turno de la defensa, el abogado Gonzalo Uribe se sumó a la idea de la "relación tóxica" que Amanda y Claudio tenían y en la que se juntaban a "consumir drogas, beber alcohol y tener sexo", señalando Uribe que según su representado Amanda se autoinfirió heridas.
En ese sentido, la defensa planteó que probablemente el acusado será condenado en relación al uso de las tarjetas. Sin embargo, "la prueba no permite derribar la presunción de inocencia respecto de la muerte".
Uribe agregó que "sin perjuicio de que no se pudo probar que Amanda había tenido tratamiento sicológico o siquiátrico, sí vamos a acreditar que sus comportamientos daban cuenta de algún tipo de enfermedad mental vinculada con la depresión (...). Uno de los grandes temas en la vida de Amanda fue su relación con su físico", sostuvo la defensa.
Agregó que "otro perito, tal vez, con algún nivel similar o superior al de la señora Bustos (perito de Fiscalía), nos podrá demostrar que estas lesiones sí son compatibles con un eventual acto suicida", indicó el defensor Uribe.