Gian Franco Giovines - La Estrella de Valparaíso

Una insólita e incómoda situación es la que viven 25 familias viñamarinas, quienes desde hace dos días se encuentran instaladas en las afueras del Colegio Hispano Americano, en el sector de Reñaca Alto, buscando hacerse con alguno de los cupos que ofrece el colegio para matricular a sus hijos.

Sillas, sombrillas, bolsos con provisiones y hasta la instalación de carpas para pasar la noche han transformado a la calle San Pedro de Atacama en un verdadero campamento de apoderados.

El escenario, ilustra perfectamente la desesperación de los padres, tíos y abuelos, quienes no han podido conseguir una matrícula para sus pequeños a través del Sistema de Admisión Escolar (SAE), ya sea porque estas postulaciones han sido rechazadas, o porque los estudiantes aún figuran en las listas de espera del sistema dispuesto por el Ministerio de Educación.

Padres indignados

Jorge Maldonado, es uno de los tantos apoderados que busca poder matricular a su hija en el establecimiento viñamarino; en este caso, para 1° medio.

"Yo ya voy a cumplir 24 horas aquí, porque llegué el domingo al mediodía, pero aquí hay gente que ya estaba de mucho antes (...) Estamos todos esperando, porque serían 25 cupos para todo el liceo. Estamos todos con la incertidumbre", dice el padre.

Tal cual como si fuera una carrera olímpica, Jorge y su esposa realizan relevos entre sí para poder conservar su lugar en la fila.

"Mi señora en este momento se fue a la casa con las niñas. Ella se quedó toda la noche aquí, hasta la mañana. Esto es verdaderamente denigrante... Supuestamente el sistema era para arreglar la educación, pero mire lo que pasa ahora. Tienes que hacer fila y después ver si es que el liceo te acepta. Vamos de mal en peor", comenta el indignado apoderado.

"nos morimos de frío"

En la misma fila, Carla Bórquez, quien hace semanas sufrió un accidente y se encuentra temporalmente en silla de ruedas, espera bajo el inclemente sol poder asegurar la educación de Martín, su hijo de 14 años.

"Llegamos el domingo, a las cinco de la tarde. Nosotros venimos de Forestal, porque mi hijo quedó fuera del sistema, no quedó en ningún liceo y por eso tuvimos que venir a hacer la fila", explica.

La madre no esconde que la espera ha sido sumamente incómoda y angustiosa, tanto para ella como para su esposo e hijo que la acompañan.

"Esto ha sido totalmente desagradable, más aún en las condiciones en las que yo me encuentro; tengo una fractura de pie, estoy con silla de ruedas", comenta la angustiada madre, quien además tuvo que dormir en una carpa para preservar su lugar.

"Pasamos aquí la noche y nos morimos de frío... No teníamos ninguna comodidad, ni siquiera baños", añade Carla Bórquez.

"Es horrible. De verdad que es súper angustiante la espera para las familias desde que comienzan las postulaciones. La espera se alarga varios meses, desde septiembre..., señala la apoderada.

La situación del Colegio Hispanoamericano, se repite en el Kingstown School de Reñaca Alto.

La apoderada Gloria Bravo, barre con el sistema de selección: "No puede ser que la gente para ir a un concierto pueda hacer una fila online y que para la educación tengamos que venir acá y estar todo un día y una noche. El sistema claramente no está funcionando".

Consultada por estas esperas,la seremi de Educación Romina Maragaño manifestó que "son casos específicos y que se dan en algunos establecimientos, ya que la mayoría de los estudiantes que hicieron su postulación a través de la plataforma SAE actualmente tienen su matrícula vigente. También sabemos la realidad de algunas comunas de nuestra región que tienen una alta demanda de matrícula en relación por sobre los cupos que ofrecen, sobre todo en el litoral central, ahí hemos estado trabajando durante todo el 2022 con los sostenedores para ofrecer soluciones de infraestructura de corto, mediano y largo plazo, los cuales van a estar disponibles, esos cupos, a partir de marzo para dar respuesta a las familias de los estudiantes que lo necesiten".