Miles de alumnos porteños sin clases por miedo a narco funeral
El cortejo de joven asesinado la semana pasada sembró pánico en Playa Ancha. Ministro de Educación dijo que "es una buena decisión" suspender clases, mientras que Interior afirmó que no se puede sacrificar la actividad escolar por el narcotráfico.
Belén Velásquez - La Estrella de Valparaíso
Una situación sin precedentes fue la que se vivió este martes en el barrio de Playa Ancha en Valparaíso, donde alrededor de 15 establecimientos educacionales suspendieron clases o adelantaron el fin de sus jornadas de forma preventiva ante la realización de un funeral de alto riesgo que atemorizó a vecinos y comunidades educativas de un cerro que normalmente tiene mucho movimiento, pero en el que ayer penaban las ánimas.
Se trató del entierro de "Ñajú", el joven que el miércoles de la semana pasada fue acribillado a tiros en la Subida Santos Ossa (Ver recuadro) y cuya muerte podría tener relación con un ajuste de cuentas relacionado a otro crimen cometido hace algunos meses en la ciudad.
Realidad desconocida
El cortejo estaba pactado para ayer, a eso de las 16.00 horas, por lo que los colegios Luterano, San Vicente de Paul, Guardiamarina Riquelme, Alberto Hurtado, las escuelas Pacífico, Hirondelle, Estado de Israel, Naciones Unidas, Reino de Suecia, entre otras, y las universidades Playa Ancha y de Valparaíso modificaron sus jornadas lectivas. A modo de ejemplo, solo la suspensión de las clases de la tarde a cinco carreras de la última casa de estudios mencionada, afectó a unos 3 mil alumnos, según informó la propia universidad.
"Acá hay un contexto que se desconoce. Se habla de un funeral de alto riesgo, pero no se conoce lo que pasa el fin de semana, el movimiento que hay en las calles o los cierres de calles mientras se esperaba este funeral. Todo eso genera un ambiente muy complejo para la comunidad, entonces decidimos acotar la jornada por hoy (ayer), no suspender clases porque entendemos que algunos necesitan la atención de Junaeb, pero se les informó a los apoderados la realidad que se está viviendo", explicó Juan Salas, director del Centro Educativo Reino de Suecia.
Agregó que "suspendimos clases a mediodía pero ese horario podría topar con el del funeral así que le pedimos a cada papá que tomara los resguardos correspondientes, lo que nos generó una baja asistencia", dijo Salas, asegurando que ayer solo llegó el 25% del alumnado.
La decisión adoptada por el establecimiento se basó en "¿qué pasa si un alumno se muere porque le llega una bala loca? ¿qué pesa más, la subvención o la seguridad de los alumnos o funcionarios?", reflexionó el director.
Salas indicó, como además es de conocimiento público, que no se trata de un hecho aislado el temor que significa este tipo de eventos: "Ya hemos tenido hartos conflictos con los funerales, estamos a dos cuadras de donde va a pasar el cortejo; si hay desvíos, van a pasar por acá mismo y lamentablemente es algo a lo que nos estamos acostumbrando".
En esta línea, el director Salas sostuvo que no se trata de intervenir solo el lugar donde se realizará un cortejo fúnebre de riesgo o donde se pueda registrar una balacera, "no es solo tapar el hoyo donde se produce el hoyo", comentó, pues "por ejemplo, tenemos alumnos del sector Montedónico y cuando hay balaceras allá, nuestros alumnos a esa hora toman la micro acá. Hay que pensar no solo dónde ocurren las cosas, sino de dónde vienen los alumnos y apoderados".
No solo "tapar hoyos"
"Si algo ocurre, por ejemplo, en Montedónico deben mandar la información a todas las comunidades porque en un colegio se le puede dar la salida a un alumno y en 15 minutos, cuando se baje de la micro, se va a encontrar con la balacera. Habría que activar un plan potente que me permita guardar a los chiquillos y no los dejo que salgan hasta que sepamos que todo está tranquilo para que no se nos mueran", dijo acongojado el director de Reino de Suecia, quien no criticó la labor de Carabineros en el sector, pero sí reconoció que muchas veces tardan en llegar debido a la poca capacidad que hoy tienen las policías, comentó Salas, quien adelantó que para hoy los alumnos bajo su mando tendrán una jornada de reflexión "porque tenemos que contener a nuestos alumnos, saber cómo se sintieron con todo lo que pasó".
Desde el Servicio Local de Educación Pública, el director regional Daslav Mihovilovic, dijo que "lamentamos profundamente que por este funeral de alto riesgo debamos tomar este tipo de decisiones, pero la integridad de nuestras comunidades siempre será nuestro principal objetivo".
"buena decisión"
Por su parte, el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, indicó que suspender las clases "es una buena decisión".
"Si mi establecimiento está en una población de alto nivel de complejidad, donde lamentablemente hay condiciones para la delincuencia o el narcotráfico, tengo que diseñar algún protocolo asociado a los temas de las balaceras", sostuvo Ávila.
"Esto no es ajeno a lo que ocurre en muchos lugares del mundo, donde lo que hacemos es evaluar los riesgos. Es una buena decisión que un establecimiento diga que suspenderá clases -con recuperación, probablemente- un día en que hay un fenómeno que puede poner en riesgo a los estudiantes", dijo el secretario de Estado.
Contraria a la posición del jefe de la cartera de Educación fue su par en Interior, la ministra Carolina Tohá, quien sostuvo que "no podemos permitir que el narcotráfico decida el calendario escolar, en Chile no vamos a aceptar que eso suceda. Tenemos que prepararnos para que cuando haya una próxima oportunidad tengamos disposición de personal, hagamos las medidas de protección necesarias alrededor de los colegios, pero no sacrifiquemos la actividad escolar por la agenda del narcotráfico, eso no es admisible en Chile", sostuvo Tohá.
Sobre lo ocurrido ayer en Playa Ancha, el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, dijo que "no es justo. Esto es lo que hace el miedo y el miedo que tiene la gente es real, no está inventado, más allá de que pueda estar amplificado por las redes sociales, pero el miedo es real y carcome cualquier posibilidad de trabajo, por ejemplo, del municipio o dirigentes para sacar adelante los sectores altos de Playa Ancha que son los que hoy están con temor".
El jefe comunal agregó que "evidentemente hay una situación grave de seguridad pública que es labor del gobierno regional, de la delegada, y las policías. Como municipio vamos a contribuir desde la perspectiva preventiva pero claramente esta situación no se había visto en este sector de la ciudad y como municipio nos negamos a que sea normalizada o naturalizada".
Operativo policial
No se habló de otra cosa durante la jornada en la zona, que ya desde temprano amaneció con ambiente enrarecido. Calles cortadas con improvisadas barreras y un amplio despliegue policial que, especialmente por la tarde, se desplegó en las inmediaciones del Cementerio N° 3 de Playa Ancha. Decenas de motos y patrullas policiales estuvieron custodiando las vías por donde pasaría el cortejo. Casi 80 efectivos.
El capitán Víctor Torres, comisario de la 1ª Comisaría Sur detalló previo al inicio del funeral que "existe un despliegue operativo en terreno, con la finalidad de darle tranquilidad a las personas que viven en el lugar y por aquellos sitios donde este funeral podría transitar".
Con 200 cartuchos
Fruto del despliegue de Carabineros, personal COP logró la detención de un hombre que portaba 200 cartuchos de fuegos artificiales y cuya intención era llevarlos al sector donde se desarrollaba el funeral.
Se trató del conductor del bus en que se trasladaban amigos y cercanos del fallecido,identificado con las iniciales R.M.M.G de 23 años, quien al costado de su asiento llevaba 4 cajas de 50 cartuchos cada uno con un total de 200 artefactos pirotécnicos.
Por instrucción del fiscal de turno, el detenido fue dejado en libertad y apercibido bajo el Art. 26.
A las 18:30 hrs Carabineros normalizó los servicios aunque personal territorial quedó atento en las inmediaciones y lugar donde se realizó el velorio ante cualquier eventualidad.
1 detenido logró operativo policial en Playa Ancha, por porte de fuegos artificiales.