Wanderers buscará seguir jugando en La Calera cuando partan los Panamericanos
Cristian Chahuán, gerente porteño, confirmó que los verdes volverán a solicitar el uso del recinto pese a la última negativa de la Delegación.
Nicolás Arancibia Bórquez
El recién pasado martes, Santiago Wanderers empató a un tanto frente a San Marcos de Arica en el estadio Nicolás Chahuán de La Calera, compromiso que se llevó a cabo pese a que los verdes no contaban con la autorización de la Delegación Presidencial Provincial de Quillota.
Tras el encuentro, José Orrego, delegado quillotano, aseguró que buscarán las "máximas sanciones" para club porteño, y en declaraciones a El Mercurio de Valparaíso, adelantó que "no me imagino que el club vuelva a solicitar jugar de nuevo en la provincia si no respeta las reglas".
Allí nace una nueva problemática para el Decano, puesto que a contar del 15 de septiembre, el estadio Elías Figueroa de Playa Ancha no podrá utilizarse producto de que el coloso albergará el fútbol femenino de los Juegos Panamericanos Santiago 2023. El estadio Sausalito (que de todos modos le ha sido constantemente negado a los verdes) también será escenario del evento, por lo que los caturros, pese al desencuentro que tuvieron con la Delegación Presidencial, volverán a solicitar el reducto calerano.
"Vamos a volver a pedirlo. Es un estadio municipal, la municipalidad nos trata muy bien, es un recinto que cumple con las normas FIFA y Conmebol para poder jugar y tiene una cancha de excelente calidad. Si nos dice que no, tendremos que irnos a Santiago, pero ¿eso es lo que quieren? ¿que Wanderers y Everton terminen jugando tal vez en Rancagua?", disparó Cristian Chahuán, gerente general de la sociedad anónima wanderina, añadiendo que "no nos gustaría salir de la región, no se lo merece el hincha de Wanderers, que es un seguidor que hace sacrificios para ir al estadio y además ahora tendría que pagar un viaje".
Piden sentido común
En las oficinas caturras todavía no conocen la cuantía de la multa que recibirán por incumplir con la resolución emanada desde la Delegación Presidencial, pero Chahuán pidió "sentido común" a la hora de establecer los hechos.
El dirigente porteño acusó que Wanderers pagó los platos rotos al estar en medio de la ANFP y la autoridad provincial. El ente rector del fútbol programó el cotejo en una fecha que los caturros habían avisado que no tendrían el estadio; posteriormente, el 25 de abril la dirigencia pidió jugar en La Calera; más tarde, el 3 de mayo, enviaron una nueva propuesta con menor aforo, la que fue rechazada el mismo día del encuentro con San Marcos. Incluso pidiendo jugar sin público, la autoridad mantuvo su postura, por lo que según Chahuán, "debimos jugar, porque de no hacerlo, nos veríamos expuestos a sanciones deportivas y económicas muy perjudiciales".
Ante la consulta sobre si habían tenido algún acercamiento con la Delegación quillotana en las últimas horas, el regente confirmó que "no hemos tenido ningún contacto formal, lo último fueron llamados de la Delegación a nuestro jefe de seguridad previo al partido. Después de eso no hemos recibido nada, pero siempre estamos disponibles para conversar, nosotros creemos que esto siempre se resuelve conversando".
nicolas.arancibia@estrellavalpo.cl