Francisca Palma Schiller

En Fundación Gastronomía Social tienen un dicho: para cambiar el mundo, hay que comer. Es que, haciendo el símil al dicho chileno "guatita llena, corazón contento", levantar los cambios que el mundo necesita se vuelve más fácil con la energía que un rico alimento proporciona.

Al menos eso es lo que están intentando desde "Comida para todos", una iniciativa que ha logrado entregar más de 140 mil almuerzos desde que comenzó la emergencia en Viña del Mar y Quilpué, en más de 50 comunidades afectadas.

Rafael Rincón, presidente de la fundación, detalla los esfuerzos que hay detrás de esta iniciativa, como también qué es lo que los mueve a alimentar, desde el cariño y la empatía, a quienes hoy más lo necesitan.

"Nuestra fundación nace en el 2019 y lo que pretendemos es, a través de la gastronomía, crear un sistema de acción que permita proteger la seguridad alimentaria, la inclusión social y la conciencia medioambiental", contextualiza Rincón, quien nos asegura que la fundación posee tres líneas de acción: "La cocina y distribución de alimentos con foco en la asistencia humanitaria; la formación profesional con foco en el empleo y el autoempleo; y la educación comunitaria, con foco en el bienestar de las personas".

Apoyar a la región

Bajo ese punto de vista, precisa Rincón, "tenemos una plataforma que se llama 'Comida para todos', que nace en la pandemia, en abril del 2020 (...) Lo que básicamente hacemos es tener un sistema logístico que trabaja con restaurantes o cocinas preparadas para llevar alimentos cocinados, almuerzos de calidad, sanos, nutritivos y balanceados, con 400 gramos como mínimo".

Con este exitoso sistema ya en marcha, quisieron ponerse al servicio de esta emergencia.

"Desde que empezó el incendio esta campaña ha tenido dos fases. La primera fase la hicimos en alianza con World Central Kitchen, una ONG estadounidense y española, y aliamos fuerzas porque quisimos hacer una campaña de altísima magnitud, donde apoyamos a 54 comunidades y entregamos 142 mil almuerzos", relata.

Ahora, con el apoyo de Fundación Coca Cola, "vamos a trabajar con cinco comunidades más, al menos durante 15 días, para llevarles 22 mil almuerzos como mínimo, es decir, son alrededor de 1.500 almuerzos todos los días".

RESTAURANTES de viña

También han creado una alianza con los propios restoranes de Viña del Mar, tales como Barbones, La Chingana del Barrio, Agape y Donde Willy, entre otros.

"(Hacemos esta alianza) porque en una desgracia siempre hay una baja en el comercio, en el turismo gastronómico y en Viña, en particular, cayó un 40% en el mejor momento del año, por lo tanto, queremos incentivar el comercio local. En segundo lugar, queremos asegurar la calidad alimentaria y, tercero, hacemos el ejercicio de apadrinamiento entre restaurantes y comunidades", reveló el presidente del organismo.

Finalmente, Rafael Rincón asegura que la experiencia en sí misma "ha sido maravillosa", ya que muchas veces, en este tipo de siniestros, el almorzar pasa a un segundo plano; sin embargo, es relevante para así contar con las energías necesarias para enfrentar las jornadas.

"El alimento es una señal de amor que reciben, porque la comida que llega está realmente hecha con mucho cariño y con buenos productos; es una comida rica, caliente, porque tenemos una línea logística impecable. Además, está la empatía, esto de que hay organizaciones que se ponen en su lugar, que se preocupan de su comida al menos una vez al día. Por último, está el hecho de crear más comunidad, de hacer un país más cohesionado", reflexionó.

2020 nació la iniciativa en el contexto de la pandemia. Hoy han apoyado a la región con una campaña de dos fases.

Esta semana, el gobernador regional Rodrigo Mundaca comentó que la seguridad alimentaria "es un tema que nos va a golpear todo el 2024". De hecho, el seremi de Agricultura de la Región de Valparaíso, Sergio Salvador, consignó que a la fecha ya son cerca de 90 las ollas comunes entre Quilpué y Viña del Mar, y que además corresponden a 23.500 los almuerzos diarios entregados.

Desde el municipio viñamarino afirmaron a La Estrella que están "brindado un apoyo permanente a las ollas comunes que comenzaron a funcionar a raíz de esta catástrofe a través de la entrega de cajas de mercadería, alimentos que se han recepcionado por medio de donaciones y colaboraciones de entidades del Estado, a fin de lograr la mayor cobertura posible para atender las necesidades alimentarias de la comunidad afectada por los incendios".

A la fecha, de acuerdo a la municipalidad de Viña del Mar, se está "apoyando a más de 60 ollas comunes, las cuales entregan distintas cantidades de raciones de alimentos en los sectores. También tenemos rutas de entrega de alimentos, ya que no todas las ollas cuentan con la capacidad necesaria de refrigeración. Por lo tanto, la entrega ha ido variando en la medida que ellas han logrado mayor autonomía y acceso a los servicios básicos de mantención y almacenamiento".

Por ello, desde la alcaldía de la Ciudad Jardín se estableció un convenio con el Gobierno Regional mediante donaciones. "Esta semana se comenzará la entrega de kits de implementos para que las ollas comunes que lo requieren con urgencia, cuenten con generadores que permitan contar con unidades refrigerantes", dijeron.

El seremi de Agricultura especificó que la fuerza de tarea "Seguridad Alimentaria" nace por instrucción del Comité de Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid). ¿Su función? "Asegurar la continuidad operativa en la entrega de alimentación a territorios afectados por incendios".