Autogobierno
En estos días complejos, frente a acciones irresponsables de algunas personas que no han respetado las medidas sanitarias en plena crisis por el COVID-19, algunos han lanzado sus dardos contra lo que consideran una expresión de individualismo. Yerran al confundir el individualismo con el egoísmo. Olvidan que la responsabilidad y el autogobierno son expresión de una individualidad bien entendida, porque entre otras cosas no es necesaria la tutela de un tercero a la hora de elegir actuar correctamente y como es debido.
El problema no es el individualismo, sino la falta de autogobierno. Es decir, la ausencia de un sentido de responsabilidad personal. En ese sentido, el egoísmo es una ausencia de autogobierno, no un exceso de individualismo. El mejor ejemplo de esto son aquellas personas que meses atrás, escondidas tras la masa, destruían o saqueaban propiedad pública y privada sin asumir responsabilidad alguna por tales actos y sin considerar sus efectos. Ahí ni hay autogobierno, menos individualismo, sino egoísmo colectivizado como diría Karl Popper.
Quizás, en vez de atacar erróneamente al individualismo, deberíamos preguntarnos cuánto se promueve el autogobierno entre los ciudadanos.
Jorge Gómez Arismendi