Camila Victoria Rojas - La Estrella de Valparaíso

Diez son los candidatos que buscan administrar el municipio de Viña del Mar tras 17 años de gestión de Virginia Reginato, quien deberá abandonar el máximo mandato comunal en 2021. Entre los nombres está Marlen Olivari, la ex show woman de la televisión chilena. Nacida y criada en la ciudad, pasó parte de su infancia en el barrio de Recreo y Población Vergara, donde cursó su educación en el Liceo de Niñas de 3 Norte. Hoy vuelve, pero con la intención de ser la jefa de la Ciudad Jardín en las elecciones de abril que ya se acercan a pasos agigantados. Entre tanto ajetreo, Olivari se sentó frente al computador y concedió esta entrevista vía mail sobre su campaña, propuestas y criticas a la administración actual ante la cual "la gente de los barrios denuncia un constante abandono, como si existieran dos Viña".

-¿Qué le motivó a cambiar de rubro y volver a Viña, ya no para disfrutar de la ciudad?

-Las ganas de aportar a mi comuna me llevaron a ir más allá. Hace 4 años conformé mi fundación para ir en ayuda de quienes más lo necesitan. La situación es evidente, me indigna, y lo quiero cambiar. El actual momento y las malas prácticas municipales me llevaron a tomar la decisión de competir porque no quiero que mi comuna quede en manos de gente de afuera y que solo ve esta opción como un trabajo más en sus carreras políticas. Creemos que la honestidad y la transparencia deben volver a la gestión municipal y nosotros desde nuestra independencia representamos ese cambio.

-El municipio de Viña tomó una posición mediática a nivel país, ¿qué opina del déficit?, ¿cuál será su labor como alcaldesa al asumir un municipio con un desfalco millonario.

-Indigna que esta situación se dé en la comuna. Es una indignación que se provoca cuando uno observa las malas prácticas, los operadores políticos y la falta de transparencia que han pasado la cuenta en quienes han sido postergados por años, por ellos quiero cambiar las cosas, por los 12 sectores y las 154 unidades vecinales. Hemos preparado un programa centrado en corregir, mejorar, transparentar y cambiar el rumbo. Vamos a implementar una nueva forma de gestión municipal, recurriendo a la tecnología como una herramienta para llevar controles exhaustivos de lo que sucede con los recursos, tomando de ejemplo a grandes urbes internacionales como Milán. La idea es que cada viñamarino sepa dónde se invierte cada peso en su comuna mediante una política transversal, de transparencia, apoyados en softwares de administración pública que permitan un control y auditoria en tiempo real. Pretendemos dar cuenta de nuestra gestión de forma periódica y dotar mediante aplicaciones de telefonía móvil una vía de comunicación directa con cada una de nuestras reparaciones, como también gestionar reclamos y denuncias ante quienes correspondan.

-¿Qué falencias detecta en la actual gestión municipal liderada por la alcaldesa Virginia Reginato?

-No lo digo yo, lo dicen los vecinos de manera contundente y abrumadora, no se está haciendo bien la pega. La falta de transparencia, el amiguismo y los problemas de gestión parecen ser las principales críticas de la gente en la calle cuando conversas con ellos. Creemos que si un equipo municipal se ve cuestionado constantemente, no se puede seguir así. Como todos sabemos la actual administración pretende seguir trabajando de la mano de la UDI con Andrea (Molina), en lo personal creo que somos los vecinos y los independientes quienes debemos ser los nuevos protagonistas, la tarea es clara, poner de pie a Viña del Mar.

-¿Está de acuerdo con la candidatura de Reginato como concejala?, ¿le gustaría que fuera parte del Concejo Municipal que trabajaría codo a codo con usted?

-Más allá de mi opinión respecto de la señora Reginato, creo que será la gente quien pasará las cuentas correspondientes el 11 de abril. Los hechos están a la vista, Viña necesita un cambio, el renuevo de los liderazgos, pero sobre todo terminar con los clientelismos y operadores políticos que tan mal le han hecho a la ciudad durante estos últimos 15 años.

-En diciembre de 2020 circuló un video en redes sociales en que fue confrontada por un viñamarino que le consultó sobre los nombres de las poblaciones y cerros de la ciudad, ¿cómo se sintió frente a esto...qué pasó por su cabeza?

-Hay mucha gente nerviosa con los aires de cambio que representamos. Sé que las campañas están llenas de estas manifestaciones interesadas, pero por lo mismo decidí no reparar en pequeñeces, porque tenemos que levantar una comuna tras dos años difíciles, debemos asumir un municipio cuyas finanzas, según lo que se sabe hasta hoy, tiene un hoyo de más de 15 mil millones de pesos. Debemos abordar la situación de inseguridad de vecinas y vecinos que deben encerrarse en verdaderas jaulas por la delincuencia en sus sectores. Creo que lo primero es centrase en Viña del Mar, y con todo esto en mente, la política sucia y las acciones malintencionadas quedan fuera del panorama.

-Repasando una de las tantas problemáticas de la ciudad, hoy el comercio informal desborda la calle Valparaíso y sumado que no hubo Festival, la falta de ingresos a este sector acrecienta, ¿qué propone para dar solución y ayuda a esta gente?

-Vamos a hacernos cargo de manera multisectorial, primero debemos hacer un catastro para ver las situaciones de cada una de estas familias, identificar quiénes son e intervenir. Podemos buscar eventuales alternativas de reubicación y poner a disposición los programas de la Dirección de Desarrollo Comunitario, buscar alternativas laborales con la Oficina de Intermediación Laboral, generar capacitaciones y otras alternativas. Quiero que cada sector sepa que no van a estar solos, dejaremos la política a un lado y me abocaré a mirar a los problemas con un solo foco, el del bienestar de nuestros vecinos y sus familias.

-¿Y frente al comercio formal, que también se ha visto fuertemente golpeado durante la pandemia?

-La municipalidad ha estado ausente en este tema, necesitamos tener el liderazgo y la fuerza para dinamizar el comercio formal. Quien paga sus patentes y brinda puestos de trabajo debe sentir que en época de crisis tiene una mano que los respalda y ayuda. Una vez en la alcaldía, vamos a echar a andar un programa de ayuda al sector comercial más afectado de la ciudad. Como alcaldesa seré la primera en golpear fuertemente las puertas del Gobierno Regional, el Ministerio de Economía, la Corfo y del Banco Estado para traer la ayuda necesaria a este sector.

-Por último, ¿cuáles son sus prioridades y cuál será su sello?

-Viña de Mar tiene todo para ser una ciudad de clase mundial de la cual todos nos sintamos orgullosos, desde los cerros al plan. Proponemos un municipio moderno, transparente con una gestión que brindará apoyo, pero además con una visión de futuro para convertir a Viña en un destino turístico nacional e internacional durante todo el año. Necesitamos un proyecto de gestión participativa que dialogue y planifique, y creo que desde mi independencia tengo las condiciones para liderarlo. A mi juicio lo clave de nuestra propuesta está en que este proyecto lo lidera una mujer independiente, que quiere recobrar las confianzas de los vecinos.