La Roja no estuvo a la altura y le dijo adiós al Mundial de Catar
Perú hizo la tarea y se quedó con el quinto puesto. Chile jugó mal y no fue capaz de vencer a Uruguay en San Carlos de Apoquindo.
Se cierra un ciclo. La selección nacional no fue capaz de hacer lo mínimo para tener una posibilidad de ir al Mundial de Catar, cayendo por dos goles a cero ante Uruguay en San Carlos de Apoquindo y terminando en la séptima en la tabla de colocaciones, todo esto mientras Perú venció por dos goles a cero a Paraguay en Lima, quedándose así en el quinto lugar de las clasificatorias y sacando con ellos los pasajes al repechaje.
Es cierto, tanto los incaicos como Colombia, que derrotó por la mínima a Venezuela, no debían ganar para que La Roja se aferrara a su escasa chance de jugar la repesca, pero el planteamiento escaso de ideas que paró Martín Lasarte no puede pasar desapercibido: Chile tenía la obligación de ganar y prácticamente no le hizo ni cosquillas a un cuadro charrúa que incluso se dio el lujo de reservar a algunos de sus futbolistas.
El combinado de nuestro país no fue capaz de enhebrar ni una sola llegada de peligro por medio de la elaboración de juego, apostando netamente a los arranques individuales de un Ben Brereton que estaba a media máquina producto de su lesión, y de un Alexis Sánchez que no tuvo su jornada más lúcida.
El elenco comandado por Diego Alonso, por otra parte, jugó desde el primer segundo con la desesperación criolla, correteando con fuerza en mitad de cancha y probando desde lejos en varias ocasiones, encontrando casi siempre la solvente respuesta de un Brayan Cortés, que junto a Joaquín Montecinos, fueron lo más rescatable de la noche en la precordillera.
Sin fútbol
Una vez comenzando el complemento, los chilenos ya sabían que Perú y Colombia estaban ganando sus respectivos partidos, pero ni eso sirvió de envión para jugar mejor. Desde la banca, para peor, no hubo ningún tipo de respuesta.
En el minuto 78', Luis Suárez quedó inexplicablemente solo en área criolla y, para hacer todo más trágico, abrió la cuenta con una chilenita que enmudeció todavía más al público local.
Ya con el partido prácticamente entregado, Federico Valverde puso el dos a cero en los 90', tanto que sirvió como antesala para que el público presente aprovechara los últimos minutos para brindarle una ovación de pie a una "generación dorada" que salió entre lágrimas.