Mirian Mondaca Herrera - La Estrella de Valparaíso

Con satisfacción han recibido los trabajadores de la salud y también la población de Valparaíso el anuncio hecho el viernes pasado por el subsecretario de Redes Asistenciales, Fernando Araos, sobre la destinación de recursos para el estudio preinversional y de proyectos de mitigación para la construcción del nuevo Hospital Carlos van Buren, y también la conformación de una comisión interministerial de búsqueda de terreno para la construcción de un nuevo recinto. Esta, según se autoimpuso como plazo la autoridad, debiese tener definido el lugar en no más de seis meses.

Es por eso que desde el ámbito de la salud ya comienzan a surgir peticiones que, enfatizan, deben ser consideradas a la hora de elegir el lugar donde se levantará el nuevo recinto de salud. Dos de los aspectos en los cuales hay coincidencias es que debe ser una zona donde no exista peligro de inundación, en el caso que un eventual sismo de gran magnitud provoque un aumento importante del nivel del mar, y que tenga una buena conectividad.

Considerando aquello, desde la FENATS del hospital porteño, el también dirigente del organismo a nivel nacional, Aron Neira, incluso se apresuró a postular a la localidad de Placilla de Peñuelas como un lugar idóneo para su construcción. Esa zona es "un lugar muy bueno porque tiene conectividad con Santiago, con distintas provincias y obviamente a través del aire, ya que el centro de Valparaíso colapsa con la cantidad de automóviles que hoy día hay, por ende está también sobre la cota de evacuación de emergencia", indicó.

Quien también comparte esta visión de Neira de que el nuevo recinto de salud debe estar en un lugar alto, lejos de la costa, es el presidente regional del Colegio Médico, Luis Ignacio de la Torre. El profesional expresó que "creemos que es fundamental contar con un terreno adecuado y es importante hacer esto de forma transparente y de cara a la ciudadanía, escuchando la voz de los trabajadores de la salud, de la ciudadanía organizada y por supuesto las voces técnicas para dar un emplazamiento que sea seguro, que esté libre del riesgo de inundación y que esté en un lugar que tenga la accesibilidad necesaria para que los ciudadanos puedan encontrar ahí la atención que requieren".

Enroque

Existe consenso en que, a diferencia que la opción que se planteó hace algunos años de emplazar el nuevo recinto de salud en la misma ubicación que el actual, aquello no es viable. El terreno donde se encuentra hoy el Van Buren no permite ampliar sus dependencias y, además, la congestión vehicular en el centro es conflictiva y, más aún, si se considera la alta demanda posee.

No obstante, desde la FENATS, Neira indica que incluso se planea proponer que haya un enroque entre el hospital Carlos van Buren y el Eduardo Pereira. El terreno donde se emplaza este último es amplio y podría albergar la construcción del nuevo recinto de salud.

En tanto, plantea Neira, que el actual edificio del primero podría recibir perfectamente al segundo, ya que este cubre una menor demanda. En ese sentido, piden ser parte de la comisión de búsqueda de terreno para presentar sus propuestas.

Diversas reacciones generó el anuncio realizado el pasado viernes por el subsecretario de Redes Asistenciales, Fernando Araos, durante la celebración de los 250 años del hospital Carlos van Buren, oportunidad en que mostró la decisión del gobierno de avanzar hacia la normalización del recinto en nuevo terreno, tema que ha sido debatido en los últimos años. De hecho, el funcionario indicó que se formará una comisión interministerial para, en el plazo de seis meses, encontrar un terreno apto para el nuevo hospital, lo que implicaría la construcción de un nuevo recinto.

No obstante la voluntad del ejecutivo, será clave para esta determinación el estudio de preinversión para el proyecto, el cual fue iniciado en 2016 y finalizado parcialmente en 2020, pero que ahora deberá ser actualizado para determinar cuál es la solución más óptima para el futuro del Van Buren y cuánto podría costar.

Según precisó el consejero regional Manuel Millones, "el estudio de preinversion que el Core financió el 2016 y que tuvo un costo de más de 400 millones de pesos, concluyó recién el 2020 y en sus conclusiones señala que a falta de terrenos en Valparaíso para construir el nuevo Van Buren, este se construya en el mismo lugar y propone alternativas para ese objetivo; es decir, el informe plantea disponer en el mismo predio, en cuatro torres, la reposición del Van Buren, demoliendo varias edificaciones de diferentes servicios y usos".

Plazos

"No obstante lo anterior, el mismo ministerio, pese a estar terminado ese estudio, resolvió actualizarlo y del punto de vista técnico es determinante para tomar una decisión sobre cuál y dónde será la solución propuesta, además de la inversión requerida (...) Este nuevo estudio requerido por la autoridad de salud debe sortear dos obstáculos: el primero económico, en otras palabras, conseguir los aportes el 2023 para actualizar los datos y los nuevos costos; y el segundo es el tiempo, ya que esa etapa no estará disponible al menos el 2023, teniendo como experiencia lo que sucedió con el análisis anterior, estudio que demoró cuatro años".

"Hay que ser claros: no se puede avanzar si no tenemos concluido los estudios definitivos de preinversión, pues son estos los que deben arrojar las alternativas y como el ministerio decidió actualizarlo y ademas el subsecretario da por sentado que será en un lugar distinto al actual recinto, entonces no podemos avanzar en el diseño y por lo mismo hago un llamado a no generar falsas expectativas y a confundir a la ciudadanía", remató Millones.